Caracas.- La primera causa de muertes en el mundo son las enfermedades cardiovasculares, y hoy tienen una incidencia entre el 36 y 38 por ciento. En Venezuela la cifra de problemas cardiológicos, llega al 40 por ciento, según advierte el doctor César Perozo, cardiólogo clínico e intervencionista, jefe del Servicio de Cardiología del Grupo Médico Santa Paula (GMSP).
“Las enfermedades cardiovasculares no solamente abarcan dolencias del corazón sino de cualquier parte del cuerpo por donde fluyan vasos sanguíneos, como por ejemplo el cerebro, riñón, aorta, miembros inferiores. Con gran preocupación vemos cómo en las últimas tres décadas, el índice de enfermedad de morbimortalidad no han bajado, a pesar de tener mayor conocimiento de la enfermedad, mejor tecnología, tomógrafos que pueden detectar antes la enfermedad. Definitivamente, nos ha faltado prevención”, expone el especialista.
Aumenta a un 53% el riesgo cuando ambos padres sufren del corazón
En la actualidad existen factores de riesgo no modificables como lo son: edad, sexo e historia familiar.
En el caso de la edad y sexo, el hombre antes de los 45 hasta los 55 tiene las incidencias más elevadas de infartos frente a las mujeres. “Si a eso le agregamos la historia familiar, entenderemos mejor el riesgo al que nos exponemos y por lo que debemos tomar acciones de prevención”.
De allí que, conocer la historia familiar es muy importante. “No es igual el paciente que señala no tener antecedentes de infartos en familia, a aquel que dice mi papá tuvo un infarto. En este caso, bien sea padre o madre quien haya sufrido un infarto, haya muerto o no, existe un 16% más de probabilidades de que la próxima generación sufra un evento coronario o infarto. Pero si papá y mamá, han tenido evento, o los dos abuelos, tuvieron una enfermedad cardiológica, entonces la próxima generación tiene hasta un 53% de probabilidades de que se puedan enfermar”.
Factores de riesgo que pueden modificarse
Para el doctor Perozo es prioritario que todo profesional del área de la salud estimule en el paciente hábitos de salud para prevenir las enfermedades cardiovasculares. “Los médicos debemos insistir más en fomentar la prevención en nuestros pacientes cuando llegan a consulta. Explicarles lo importante que es comer saludable, hacer ejercicio como complemento de una dieta balanceada, que no solo tonifica el cuerpo sino que ayuda con la ansiedad y el estrés”.
Los hijos morirán antes que los padres
No considerar cambios en los factores de riesgos que pueden modificarse, supone para el doctor Perozo un futuro muy desalentador, pues los hijos morirán antes que los padres.
“El llamado es mundial. Si seguimos con estas tasas enormes de obesidad, hipertensión, diabéticos, pacientes sedentarios, que llevan a enfermedades cardiovasculares, nuestros hijos se van a morir antes que nosotros. Ya grandes compañías de bebidas, están implementando herramientas de salud para hacer los cambios necesarios y permanecer en el mercado. Pero nosotros que fomentamos salud, tenemos la responsabilidad de estimular ese cambio de cultura para tener personas más sanas”.
Hoy, el reto de los especialistas de la salud es reducir las estadísticas de las últimas tres décadas, y para ello proponen trabajar en conjunto con los padres, educándolos para que sean ellos quienes a su vez transmitan buenos hábitos a sus hijos, “que practiquen educación física, no sólo para convertirse en un jugador estrella, sino por su salud.”
Los factores de riesgo que pueden modificarse para evitar enfermedades cardiovasculares se relacionan con la mala alimentación, la obesidad, el colesterol, la diabetes, pacientes sedentarios, pacientes que no controlen el estrés adecuadamente, el tabaquismo, consumo de cigarro, drogas, entre otras.
¿Qué hacer para cuidar tu corazón?
Para el doctor Perozo es importante que el paciente se esfuerce por hacer los cambios sobre los factores de riesgo modificables. “Es la persona quien decide parar de fumar, controlar la tensión haciendo ejercicios, tomando los medicamentos correctos y alimentándose mejor. En los congresos de salud coincidimos en trabajar con los factores modificables, es lo que nos puede cambiar los índices de morbimortalidad,” expresó el experto en cardiología.