1 No recuerdo quién dijo que los libros podían ser una bendición o una maldición, según se viera.
Entiendo mejor lo que está pasando con nosotros precisamenteporque leo libros que me ayudan a desentrañar el caos venezolano.
Leo las meditaciones de Marco Aurelio y aprendo que debo dominar la situación deprecariedad en la que vivimos.
Leo el Walden de Thoreau y comprendo que una vida se puede cambiar por otra vida, para así vivir muchas vidas. Leo el Eclesiastés y concluyo que cada cosa tiene su hora. Leo la Historia del tiempo de Stephen Hawking e intuyo que todo el universo alguna vez dejará de ser. Entonces ¿para qué me preocupo?
Los libros, desde la perspectiva del conocimiento que nos deparan, son una bendición. Pero son una maldición si piensas que jamás podrás leerlos todos.
2 Quien lee libros puede terminar escribiendo libros. Durante veinte años diseñé un manual sobre Historia de la Medicina Universal el cual he divulgado entre mis estudiantes y colegas. En tiempos de pandemia y de cambios en la manerade impartir clases con prioridad hacia lo digital, compartir, es lo menos que se puede hacer.
Edgardo Rafael Malaspina Guerra
