Parapara.- Pedro Eusebio Seijas Silva, conocido como el popular Don Perucho, nació en el pueblo de Parapara, un 4 de agosto de 1941, hijo de Rafael Seijas león descendientes de los pobladores de Payarriba y de Doña Isabel Silva Medrano descendiente del caserío Cantagallo.
Realizó estudios en la única escuela que existía para la época bajo la dirección de la maestra Lucia Alvares Rivero, donde culminó estudios hasta cuarto grado de instrucción primaria, ya que hasta allí se lograba estudiar.
Posteriormente se traslada a la ciudad de San Juan de los Morros en la búsqueda de nuevos horizontes ingresando a la Escuela Granja que funciono en el antiguo Hotel Termal, que hoy en día se encuentra abandonado.
Desde que cumplió sus trece años de edad, asumió el papel ya de hombre y decidió ponerse a trabajar y ayudar a sus hermanos, realizó tareas propias de campo, tales como: becerrero, ordeñador, arreador de ganado, trabajó muchas faenas agrícolas en la propiedad de un isleño llamado Arsenio Rodríguez donde aprendió a manejar tractores camiones, a cultivar melones, pepino, tomate, pimentón, los cuales eran llevados al mercado principal de Caracas, Quinta Crespo.
Fue un hombre que logró trabajar en el reconocido local ‘’Bar Restaurante Parapara’’ como mesonero ganando 30 bolívares mensuales, también se desempeñó como bombero en la estación de gasolina propiedad del mismo dueño del restaurante.
Este ejemplar amigo, se destacó en dos oportunidades como Presidente de la Junta Comunal y dos veces como Prefecto de la parroquia, por otra parte por las luchas sociales que enfrentó lo condujeron a estar 51 días bajo las rejas en los Pinos, cárcel pública, por ser solidario de un problema justo que reclamaban los sin tierras, siendo asistido por más de siete abogados, que a pesar de las diligencias y la comprobación de no haber cometido ningún delito, no lograron restaurar su libertad inmediata.
Cuando logra su libertad plena y absoluta el pueblo lo esperó en la calle brindándoles el apoyo, cariño y solidaridad reconociéndolo como un líder social.
Así mismo, fue nombrado Patrimonio Cultural del estado Guárico, por poseer un amplio conocimiento de la historia local, gran amigo del cronista y poeta Félix Manuel Belisario, fue un personaje muy querido y apreciado por los habitantes de Parapara, siempre mostró carisma para contar cuentos, chistes de aparecidos, cantador de tonos en velorios de cruz de mayo, quien mantuvo esta costumbre acompañado de los cultores como Rafael Seijas, su sobrino, Julio Mota y Alba de Belisario, quienes han representado a la parroquia Parapara en otros municipios en encuentros de velorios de cruz.
Don Perucho contrae matrimonio en el año 1968 con la Sra. Migdalia Mota Castillo con quien tuvo tres hijas, que llamaron Vicmary Seijas, Isabel Seijas y Neuris Seijas.
Entre lágrimas, su hija Isabel Seijas cuenta que su padre, ‘’como esposo fue hombre muy responsable con su hogar, cariñoso, muy hogareño, era un hombre que estaba muy pendiente de su casa, era muy celoso, era una persona muy entregada, pendiente de que nunca faltara nada en la casa’’.
‘’Como padre, era muy expresivo, alegre, le gustaba mucho compartir con nosotras, muy tradicionalista, en estos tiempos decembrinos ya estaba pendiente de las hallacas, a pesar de que ya nos casamos, siempre estaba pendiente de cuidarnos, excelente padre, no tengo nada que decir de papá, muy estricto, tenía un carácter fuerte”, señaló su hija.
Relata que le gustaba que uno notara las cosas buenas que él hacía, “detallista, una de la cosas lindas entre tantas, es que papá siempre era el que llevaba a uno al médico, mamá poco nos llevaba, siempre en las reuniones familiares le gustaba hablar, le gustaba bailar, le gustaba echar cuentos, los domingos nos reuníamos a compartir en familia, además era muy enamorado,no podía ver una mujer porque ya le estaba diciendo cosas”.
‘’Una de sus tantas enseñanzas que nos dejó, es que debíamos ser humildes, que cuando ya él, no estuviese y anduviéramos caminando en las calles dijeran esas son las hijas de Perucho Seijas, a él le gustaba ayudar a las personas, papá aquí en Parapara fundó muchos sectores’’, expuso la descendiente de este personaje. Agregó que ‘’Como abuelo siempre decía que teníamos que crear a nuestros hijos como él, nos crió a nosotras, a pesar de que él era cariñoso, también era un hombre de mucho temple, él decía a los niños hay que pegarles cuando piden palo, no le gustaba consentir las cosas malas de los muchachos, sí había que corregirlos lo hacía, siempre estaba pendiente de que ellos no se criaran con malas costumbres, con malos hábitos’’.
Finalmente nos cuenta que antes de su partida solía atender su bodega ubicada a las orillas de la Carretera Nacional, donde muchos parapareños se detenían allí, con el fin de saludarlo, entrevistarlo, recabar información y porque no, intercambiar unos tragos de ponsigué, formula aprendida de amigo y compadre Don Félix Manuel Belisario hoy día también fallecido.
Actualmente es recordado por su buen sentido de humor y esa sonrisa que lo caracterizaba. Falleció el 24 de abril del 2015, dejando como legado su frase preferida ‘’EDÚCATE’’.
Pasante ECS/Unerg
Norelquis Fleitas
