Guárico.– Sobre el sacerdote Lenín Bastidas pesan amenazas de cárcel. El “cura caminante”, como es conocido por realizar una marcha en 2016, fue detenido por ocho horas en la comandancia de Poliguárico, en el municipio José Tadeo Monagas, este 2 de agosto, luego de que convocara y participara en una movilización religiosa por la paz.
Bastidas afirmó a Efecto Cocuyo que suele cambiar de domicilio para sentirse más seguro y aseguró que ha visto motorizados “extraños a la comunidad” rondando la vivienda en la que pasa el día. “Yo responsabilizo al Gobierno de (Nicolás) Maduro si me desaparecen o me pasa cualquier cosa”, sentenció vía telefónica.
El pasado jueves 2 de agosto, el sacerdote había programado una marcha en la que recorrerían al menos 7 kilómetros hasta llegar a la plaza Bolívar de Altagracia de Orituco. Según narró, desde las 8:00 de la mañana fue advertido de los puestos de control que había instalado la policía para impedir la manifestación presuntamente por orden de la Gobernación de Guárico.
“Me fui por los caminos verdes y logré llegar hasta Camoruco; desde ahí comenzamos a caminar entre oraciones, rezando el rosario de la Misericordia. Se nos unieron las enfermeras que protestan por mejores salarios y había niños y adultos mayores. De pronto, se nos atraviesa Poliguárico y nos dice que no tenemos permisología para caminar, a lo que respondo que vamos a caminar por la acera entonces, como ciudadanos, rezando“, señaló.
Pero los funcionarios del cuerpo de seguridad insistieron en que tenían orden de detener la protesta, que concentraba aproximadamente a 200 personas, y de arrestar a Bastidas. “Como decidimos caminar por la acera, llegó la patrulla de refuerzo y los funcionarios estaban armados con bombas lacrimógenas y rifles. Cuando lanzaron la primera bomba de gas, la gente comenzó a dispersarse y la policía tenían las armas cortas en la mano. Entonces decidí meterme en la patrulla para evitar que dispararan“, declaró.
El sacerdote responsabiliza al comandante de Poliguárico, Frank Hernández, de dar la orden de arrestarlo. En su versión, sostuvo que no recibió agresiones de los funcionarios policiales y que fue liberado luego de que un grupo de habitantes de Altagracia de Orituco iniciara una vigilia a las puertas de la comandancia.
“Ya tenían lista la minuta en la que me acusaban de delitos de incitar a la violencia y a delinquir y me amenazaban con trasladarme a San Juan de los Morros para presentarme ante la Fiscalía, pero gracias a la presión de la gente me liberaron”, expresó.
Bastidas agregó que en las próximas horas convocarán vigilias en los 335 municipios del país para crear conciencia de la crisis humanitaria que atraviesa Venezuela. “Intento hacerle un llamado a los obispos a que demos la cara por este pueblo en medio de esta crisis humanitaria, que le creemos conciencia al pueblo de la realidad volviendo a Dios a través de la oración y la manifestación pacífica“, concluyó.
Titulo: El Tubazo Digital / Foto: Yanni Carpavirez / Texto: Efecto Cocuyo