Los Yankees y los Dodgers, los dos grandes favoritos a las Series Mundiales para las casas de apuestas por internet, han afianzado su posición en el arranque de la pretemporada, porque los angelinos, con una marca de 6-2 en la Cactus League y los del Bronx, con idénticos dígitos en la Grapefruit League rondan las primeras posiciones de sus respectivas Ligas de exhibición en la Spring Training. San Diego (6-1) y Milwaukee (5-2) han sido los únicos en mejorar a los Dodgers y Toronto (5-1) en hacerlo con los Yankees.
Los Yankees, con un dividendo a campeón de 4,50 a 1 y una estimación por parte de los bookies de 101 o 102 victorias a lo largo de la temporada regular, han ido de menos a más en su preparación. Se estrenaron con derrota frente a los Blue Jays (2-1) y también perdieron ante Tampa en su segundo compromiso (9-7). Pero después de empatar frente a los Pirates en el tercero (3-3) han encadenado seis victorias consecutivas para confirmar su potencial. Toronto (4-1), Washington (8-2), Tampa (7-1), Atlanta (5-3) y los Red Sox en doble enfrentamiento (5-2 y 8-2) han sido las víctimas de los de la Gran Manzana.
Los Dodgers, que quintuplicarían lo apostado por ellos en el caso de salir campeones, también cerraron febrero con un balance de seis victorias, un empate y dos derrotas. En su caso, comenzaron la preparación con victoria ante los Giants (10-4) y frente a los Cubs (4-2) y se tomaron un respiro en su racha triunfal al empatar contra los White Sox (2-2) y caer ante los Diamondbacks (7-3). Superaron a los Angels (9-4) y a los Indians (6-5), perdieron frente a los Brewers (6-5) y derrotaron en doble enfrentamiento a los Diamondbacks (7-4 y 14-2).
Los dos máximos candidatos partirán también como favoritos en sus próximas citas tal y como puede comprobarse en las cuotas del comparador Win Comparator, y así tener una mejor idea a la hora de realizar pronósticos y apuestas deportivas béisbol.
El rechazo a los Astros por el robo de señas
El tercer favorito en las apuestas a campeón, Houston (7 a 1), no está cumpliendo sin embargo las expectativas. En el ojo del huracán después de que se haya desvelado que a lo largo de la temporada de 2017 usó un sistema de vídeo para robar las señas de sus rivales, el escándalo parece estar pasando factura a los Astros, quienes sólo han podido ganar tres de sus ocho encuentros de pretemporada de febrero, empatando uno y perdiendo los cuatro restantes.
La investigación de la MLB ha confirmado que una cámara instalada en el jardín central de su estadio estaba conectada a un monitor instalado en el banquillo de los Astros. Allí, un empleado de los Astros, golpeaba dos veces con un bate un cubo de basura cuando la seña del cátcher al pitcher era para que éste no lanzara un tiro recto. Estas trampas, ayudaron a los Astros a conquistar el anillo y además de las suspensiones del mánager y el gerente general, una multa de 5 millones de dólares y la pérdida de primera y segunda ronda de los sorteos de 2020 y 2021, Houston está recibiendo día a día el rechazo general de aficionados y del resto de los equipos.
De los aficionados, porque las hinchadas les están recibiendo con abucheos antes y durante los encuentros de pretemporada que están disputando, además de mostrar pancartas en las que les reprenden por lo acontecido. Del resto de los equipos, porque los bateadores de los Astros han notado el rechazo de gran parte de sus compañeros. Además, y pese a que la MLB haya anunciado que tomará medidas disciplinarias contra quien lance pelotazos intencionales a los jugadores de los Astros, los bateadores de Houston han recibido ya ¡siete pelotazos! en cinco partidos.
Mientras el comisionado sigue con preocupación este tema, la Liga prepara también nuevas reglas contra el robo de señales, que podrían entrar en vigor esta misma temporada. Entre ellas podrían contemplarse la prohibición de cámaras de campo internas y que las transmisiones en directo se limitaran a un funcionario designado para las repeticiones de cada conjunto, funcionario que estaría ‘vigilado’ por un encargado de seguridad. Además, los monitores de vestuarios y zonas de calentamiento podrían tener un retraso de ocho segundos respecto al directo.
