I Nunca en 20 años de Chavismo, se había llegado tan lejos para alcanzar nuestros anhelos. Soy de la generación que jamás en su vida había visto en el cargo de la Presidencia de la República a una persona civilizada, desde que tengo uso de razón escuchaba al extinto comandante insultar a diestra y a siniestra, sembrando en mi consciencia una inquietud: “¿Así son los presidentes?”.
Más tarde con la investigación y la lectura descubrí que esto no era así, tuvimos a políticos honrados y a presidentes con una verdadera conciencia ciudadana. Fue Chávez quién hizo renacer los viejos demonios del militarismo y del caudillismo, que tras 40 años de democracia parecían historia pasada.
II Tendríamos que remontarnos al 4 de febrero de 1992 para saber realmente la cifra verdadera de los caídos por la causa “Revolucionaria y Bolivariana” que después por allá en el año 2004 se le añadió el Socialismo, quedando una ensalada incompresible: Revolución Bolivariana y Socialista, denominada de esta manera por los mismos precursores de esta pesadilla.
Lo cierto es que, esto no es nada de eso, ni es Revolución, ni es Bolivariana, ni es Socialista, esto se convirtió en un poco de todo lo nefasto: Militarismo, Fascismo, Populismo, Demagogia, todo menos lo anterior mencionado.
III La usurpación del poder tampoco es nada nuevo, el Chavismo se robó todo lo que podía en cada rincón que pudo. Instituciones, Universidades, bancos, empresas, usted nómbrelo que el Chavismo robó y se hizo con ello.
Utilizaron la CRBV del 99 que diseñaron a su medida para adentrarse en cada uno de los ámbitos del país, y hasta con el más delicado: las Fuerzas Armadas, que también le acuñaron el termino mal usado por 20 años: Fuerza Armada Nacional “Bolivariana”. Usurparon RCTV y los medios de comunicación que quedan están censurados y trabajan bajo amenaza, los medios no tienen la culpa, el régimen sí.
IV Lo más peligroso de las dictaduras modernas es su inteligencia para el disfraz. Se hacen una máscara de democracia y a una buena parte del mundo le hacen creer que lo son, claro, mientras hay dinero para callar bocas, cuando ya no pueden mojar la mano estos despiertan y ven el hambre, la opresión y la persecución. Chávez fue un maestro en esto, se hizo con países de Latinoamérica: Argentina, Ecuador, Brasil, etc…
La diferencia está en que estos países no pudieron entablar esto, sus instituciones permanecieron sólidas y también su economía, y ya mientras escribo esto, esos presidentes que apoyaron a Chávez les cayó el peso de la ley o están próximos a eso. (Omito a Bolivia y Nicaragua que aún están en las manos de Chavistas)
V Enero de 2019 ha sido un mes movido. En Venezuela hay un fenómeno bastante peculiar, los fenómenos políticos suceden en el primer cuatrimestre: 19 de abril de 1810, 23 de enero de 1958, 27 de febrero de 1989, 4 de febrero de 1992 y ahora 23 de enero de 2019 (estoy seguro de que omito algunos).
El 23 de enero de 2019, Juan Guaidó se juramenta como Presidente encargado de la República, invocando los artículos 233, 333 y 350. Hay que aclarar algo, Juan Guaidó no se “autoproclamó”, su proclamación tiene sostén popular por la realización de los Cabildos Abiertos (art. 70 de la CRBV) los días previos al 23 de enero alrededor del país.
VI 2018 fue un año Chavista. El régimen logró hacer que los factores de la oposición implosionaran. Fue un año en que se apretaron las tuercas en todos los elementos políticos y económicos, así el régimen tomó fuerza.
Pero nada más comenzando el 2019 se ha mostrado titubeante y movido en sus cimientos, logrando el pueblo junto con sus representantes del parlamento abrir las ventanas para “Despertar de esta pesadilla y volver a soñar”.
VII Los venezolanos nos dimos cuenta de que en la unión está la fuerza. La polarización la generó Chávez desde el mismo momento en que fracasó en su intentona golpista del 92. Hubo quienes apoyaron a los rebeldes porque había crisis e inestabilidad, esto es totalmente cierto, sí había inestabilidad económica para ese tiempo, pero creo que hemos logrado diferenciar entre crisis económica y destrucción económica.
Chávez gana las elecciones del 98 y de allí en adelante el país ha sido blanco y negro, rojo y azul, chavista y opositor, pero nos dimos cuenta de que el estómago no escucha discursos políticos y que el cáncer no tiene tratamiento ni en la oposición ni en el Chavismo, sólo en la unión y en la re-construcción de Venezuela tendremos eso, seremos venezolanos y no opositores o chavistas.
VIII Compatriotas fieles, la fuerza es la unión.
IX No lo llamen gobierno, llámenlo mafia o régimen, porque esto nunca fue “Gobierno”.
Francisco Rodriguez Sotomayor