(Esta lectura me obligó a caminar mirando el suelo para no pisar las hormigas)
Schopenhauer consideraba el budismo una religión superior y la utilizó en su filosofía, planteada en su obra capital “El mundo como voluntad y representación”.
Del budismo extrae Schopenhauer las ideas de ascetismo y la compasión para contrarrestar las fuerzas que provocan el sufrimiento.
He aquí algunas tesis extraídas del interesante libro “Los siete pasos del amor” del Dalai Lama.
1 –Si dirigimos nuestra vida pensando en el bien del mundo, estamos llevando una vida religiosa.
-Esta es mi religión, una religión sencilla que no necesita templos ni complejas filosofías. Tu propia mente, tu propio corazón, es el templo; tu filosofía, la simple bondad.
-Hay que reconocer a los amigos; y esto incluye a los animales como perros y gatos.
2 -El terror se detiene con el altruismo.
-Debemos agradecer la bondad.
-Conviene que no hayas comido demasiado por la noche y que tampoco hayas dormido en exceso, pues así tu sueño será más ligero y eso hará que al día siguiente la mente esté más ágil y aguda.
3 -Alcancemos o no nuestro objetivo en esta vida, merece la pena continuar con la lucha.
– La bondad debe ser correspondida con bondad.
4 –Se puede aprender amar.
-Los problemas no se resuelven con ira.
-La compasión debe extenderse hasta los insectos.
-Ayudar a los demás tiene un gran poder mental.
-Sin enemigos no podrías dedicarte plenamente a la práctica de la paciencia y la tolerancia. Necesitamos enemigos y deberíamos estarle agradecidos. Únicamente un enemigo puede enseñarte la tolerancia. Un enemigo es el mejor maestro del altruismo, y por esa razón deberíamos respetarlo en lugar de odiarlo.
-Hay tres venenos o emociones destructivas: el deseo, el odio y la ignorancia.
-El altruismo libera.
5 –La buena fortuna no es permanente; por tanto es peligroso apegarse en exceso a las cosas que van bien. La idea de permanencia es desastrosa.
-Piensa siempre que todo perece y que tú también perecerás.
-La muerte de una persona y la de un animal son iguales.
-Solo relacionándonos con personas que nos quieren perjudicar, podemos cultivar realmente la gran virtud de la paciencia. Así pues, el enemigo es absolutamente necesario.
-La compasión es, junto con el amor, la cara del altruismo. Y hay que practicarla hasta con los enemigos.
–Ten compasión por los animales indefensos.
6 -El sufrimiento puede proporcionar una valiosa oportunidad para seguir reflexionando.
-Hay que practicar la compasión grande: el compromiso de ayudar a eliminar el sufrimiento de todos los seres vivos.
7 -Si puedes, deberías ayudar a otros. Si no puedes, al menos no deberías hacerles daño.
-El altruismo ilumina.
-Las cosas materiales se corresponden con la felicidad física, mientras que el desarrollo espiritual se corresponde con la felicidad mental.
Edgardo Malaspina