Caracas.–El béisbol venezolano está lleno de figuras invaluables que se ganan el respeto y la admiración de la gran mayoría de los fanáticos. Endy Chávez es una de ellas y por ello en esta campaña, tras el anuncio de su retiro como pelotero profesional, los honores y reconocimientos no han faltado.
El jardinero, novato del año de la campaña 1999-2000, aseguró que es momento de dar un paso al costado pues a sus 41 años le es difícil prepararse cada año para comenzar una nueva temporada. Y aunque su agilidad física parece intacta y ahora mismo tiene un bate que promedia .319, el retiro parece inminente.
“Mi carrera ha sido muy buena, conviví con grandes peloteros cuando era novato y aprendí de todos. A Edgardo Alfonzo, Richard Hidalgo y Melvin Mora les debo mucho y a la fanaticada del beisbol le expresó mi profundo agradecimiento por su apoyo incondicional. Este año ha sido mágico, jamás me imaginé ser ovacionado en un estadio visitante, jamás pensé que iba tener que alzar mi casco para despedirme de otras aficiones. Estoy orgulloso y agradecido”, confesó.
Endy es una figura insigne para los Navegantes del Magallanes y el béisbol en general. Su carrera es ejemplo para todo el que quiera brillar en este circuito. Un bate valioso, un guante dorado y una calidad humana que evoca cercanía es la carta de presentación del carabobeño, que comenzó a dar grandes pasos en 1995, cuando aún lucía frágil para este béisbol pero ya se evidenciaba su calidad, según precisó Carlos Feo, narrador del circuito radial turco desde hace 25 años.
Por su parte, Dámaso Blanco, exjugador de los eléctricos y también comentarista del circuito radial del club durante muchos años, describió a Endy como una figura universal del béisbol, que merecía ser reconocido en distintas plazas como ocurrió en el Antonio Herrera Gutiérrez de Barquisimeto, el José Pérez Colmenares de Maracay, el Luis Aparicio “El Grande” de Maracaibo, el Estadio Nueva Esparta, el parque de la Ciudad Universitaria y por supuesto el José Bernardo Pérez de Valencia.
“Endy llegó a Magallanes en una época dorada en la que estaba Melvin Mora, Juan Carlos Pulido, Richard Hidalgo, Johan Santana, Edgardo Alfonzo, Alvaro Espinoza, entre muchos otros, pero eso no lo detuvo, al contrario aprendió de todos. Siempre ha sido modesto, humilde, respetuoso del juego y de la gente, eso es realmente lo que ha hecho tan querido”, explicó Blanco.
Innegablemente la historia de Endy, un bateador de 19 temporadas y más de 600 hits, se ha escrito sobre el registro de grandes jugadas en los jardines, joyas defensivas que han calado en la memoria de los fanáticos, quienes se encargan de recordárselas en cada encuentro en el que se reúne con ellos para firmar autógrafos.
Endy Chávez pone fin a una carrera extraordinaria en la que, a su juicio, la clave ha sido la disciplina y la dedicación con la que ha afrontado cada temporada.
“El béisbol lo tiene todo, solo tienes que saber aprovechar cada pitcheo, sin importar si es bueno o malo”, concluyó.
Fuente
El Universal