Caracas.- El sexo puede ser doloroso por múltiples razones y aunque creamos que esta circunstancia es muy extraña, lo cierto es que son varias las personas que en lugar de disfrutar con el sexo lo consideran una tortura.
Por este motivo, creemos necesario exponer algunas razones por las que el sexo puede ser doloroso para prevenirlas y disfrutar de la relaciones.
1. Es posible que no se esté completamente excitada
“Hay muchos factores que contribuyen a la falta de excitación. La cantidad indebida de presión que las mujeres se imponen en la cama”, le explicó a Huffington Post, Vanessa Marin, una terapeuta sexual con sede en Los Ángeles.
“El mito de que los hombres siempre están listos para el sexo puede hacer que las mujeres se sientan culpables por necesitar más tiempo para el juego previo, lo que resulta en una penetración que puede ser demasiado apretada”, agregó Marin, o una cualidad casi irritante.
“Si te sientes totalmente excitada pero tu vagina se siente tensa y seca, un lubricante a base de silicona puede ser una solución increíble”.
“La falta de lubricación vaginal produce dolor. Puede tener distintos orígenes: disminución de la producción de estrógenos durante el climaterio y la menopausia, infección vaginal o urinaria, inflamación vaginal, presencia de alguna infección de transmisión sexual, ingesta de algún medicamento que disminuye la lubricación, cambio en el PH (acidez) de las secreciones vaginales, etc.
Aunque la mujer esté suficientemente lubricada para la penetración durante la relación sexual la lubricación puede disminuir y causar dolor o molestia”, añade la Licenciada Andrea Gómez.
“Una manera de lograr la excitación, ayudar a la lubricación y alcanzar el orgasmo es la masturbación. Pero las mujeres, por lo general, no realizan esta práctica autoerótica o la consideran un sustituto inadecuado de la penetración o un acto perverso para lograr la satisfacción sexual.
Lo cierto es que el clítoris es el órgano encargado de decodificar la estimulación recibida y desencadenar el orgasmo en la mujer. Su estimulación directa o indirecta (con penetración vaginal) es la que desencadena el orgasmo femenino. Los prejuicios y desconocimientos inhiben esta estimulación que suele ser ideal para excitarse y lubricarse evitando así el dolor en la penetración”, cierra Gómez.
2. Podría ser vaginismo
El vaginismo es “hipercontractilidad involuntaria de los músculos del piso pélvico con penetración o intento de penetración vaginal”, explicó Leah Millheiser, directora del Programa de Medicina Sexual Femenina del Centro Médico de la Universidad de Stanford.
En otras palabras, los músculos dentro y alrededor de la vagina se tensarán, haciendo que la penetración sea extremadamente difícil y más dolorosa.
“Las causas pueden variar, pero es probable que haya un componente emocional en juego aquí. Si alguien ha experimentado un trauma pasado, ya sea un ataque sexual o una lesión de la ingle en la infancia, puede causar ansiedad asociada con la penetración y provocar un apretamiento como medida de protección”.
“Desafortunadamente, una vez que alguien percibe que algo va a doler, aprieta aún más sus músculos”, explicó Rebecca Brightman, obstetra y ginecóloga con sede en Nueva York. Afortunadamente, con la terapia cognitiva y/o la terapia física del piso pélvico, Brightman y Millheiser han visto pacientes con vaginismo recuperarse por completo.
3. ETS u otra infección
“Las infecciones de transmisión sexual como la clamidia y la gonorrea pueden causar dolor pélvico durante las relaciones sexuales”, según Brightman y Millheiser. O bien, “si experimentas dolor externo alrededor de la vulva, puede deberse a un brote de herpes.
Si ves lesiones o llagas, dirígete con tu médico; pueden recetarte medicamentos para ayudar a controlar los brotes. Tu médico también puede recetarte antibióticos para otras Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS)”.
Una infección por hongos no es una ETS, pero eso también puede causar comezón y rozaduras externas o quemaduras internas que pueden hacer que las relaciones sexuales se sientan incómodas.
Medicamentos de venta libre o una receta de tu médico pueden ayudar a combatirlo lo antes posible.
4. La técnica de la pareja es simplemente incorrecta
Aprender cómo pedir lo que se siente bien en la cama puede ser un desafío, pero es increíblemente importante, no solo para la intimidad emocional, sino también para la comodidad física. Marin sugiere una ronda suave de “¿esto o aquello?”.
“Básicamente, has que tu compañero toque la misma área de dos maneras diferentes y ve a cuál respondes de manera más favorable. ¿Prefieres un masaje o algo más duro? ¿Un golpecito o un toque? No es necesario que resuelvan todo de una vez, pero dar pasos puede ayudar a que tú y tu pareja tengan mejores relaciones sexuales para ambos”, dijo Marin.
5. Podría ser endometriosis
La endometriosis es una afección en la que el tejido que normalmente recubre el interior del útero crece fuera de él, lo que produce una acumulación dolorosa de tejido cicatricial que duele especialmente durante las relaciones sexuales.
Los órganos se mueven un poco durante las relaciones sexuales, y si el tejido cicatricial hace que la pelvis y el cuello uterino estén menos móviles, se sentirá doloroso.
Además, la endometriosis puede provocar quistes en los ovarios (o puedes tener quistes ováricos debido a tu ciclo menstrual), lo que puede causar molestias.
“Los tratamientos que incluyen terapia hormonal o cirugía pueden ayudar con la endometriosis. Y si un quiste ovárico está causando dolor severo durante el coito, puede ser lo suficientemente grande como para justificar la extirpación quirúrgica”, anotó Millheiser.
6. Podría ser el método anticonceptivo
Un dispositivo intrauterino que se desprendió podría causar un dolor profundo y agudo durante las relaciones sexuales. Alternativamente, tu método anticonceptivo podría ser el culpable.
“Algunas opciones de anticonceptivos, como la píldora, detienen la producción natural de hormonas y las reemplazan con las dosis más bajas que se encuentran en el medicamento”, dijo Millheiser.
El resultado de esos niveles más bajos de estrógeno y testosterona resulta a veces en un adelgazamiento de la piel alrededor de la vulva, que puede causar inflamación e irritación cuando se estimula (esto a veces se conoce como vestibulodinia provocada).
“Platica con tu médico sobre opciones alternativas de anticonceptivos para que puedas encontrar una mejor opción para ti”.
7. Podría estar relacionado con el parto
De manera similar a algunos métodos anticonceptivos, las mujeres que están amamantando después del parto pueden esperar alguna relación sexual dolorosa.
Tanto Brightman como Millheiser explicaron que el cambio en los niveles hormonales puede causar que la vagina se seque y la piel se adelgace.
“Con tratamientos como la terapia de estrógenos vaginales (tratamiento medicinal en forma de píldoras, supositorios o parches), o simplemente un buen lubricante, se puede esperar tener relaciones sexuales más cómodas durante este proceso”, dijo Millheiser.
8. Puede ser un problema gastrointestinal
“Si alguien está estreñido o tiene Síndrome del Intestino Irritable y tiene relaciones sexuales, podría estar ejerciendo presión sobre una parte del cuerpo ya irritada, lo que daría lugar a una sensación de malestar en los intestinos”, según Millheiser. Pero un médico puede diagnosticar ambas afecciones y recetar medicamentos para ayudar.
Si bien, hay muchas causas potenciales de dispareunia, también hay muchos tratamientos. El sexo doloroso es un dolor, pero no tiene que ser permanente.
Fuente
Con información de Noticia Al Día