Caracas.-Una nueva investigación muestra una mayor promesa para el uso de medicamentos de tratamiento del SIDA como una herramienta de prevención, para ayudar a evitar que las personas no infectadas contraigan el VIH durante las relaciones sexuales con una pareja que tiene el virus.
No hubo infecciones entre los hombres homosexuales que usaron una pastilla combinada de dos medicamentos ya sea diariamente o justo antes y después de tener sexo con alguien con VIH, encontró un estudio. En un segundo estudio, ningún hombre no infectado contrajo el virus si solo tenía relaciones sexuales con una pareja cuyo VIH estaba bien suprimido por los medicamentos.
Ambos estudios fueron discutidos el martes en la Conferencia Internacional sobre el SIDA en Amsterdam.
El principal científico del SIDA de los Estados Unidos, el Dr. Anthony Fauci, calificó los resultados como “muy impresionantes” y “realmente sorprendentes”.
Alrededor de 36 millones de personas en todo el mundo tienen VIH y 1,8 millones de nuevas infecciones ocurren cada año, dijo Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas.
“La única forma en que vas a terminar con la epidemia es previniendo casos adicionales de transmisión”, dijo. Los medicamentos de tratamiento son “herramientas que, si se implementan ampliamente, teóricamente podrían acabar con la epidemia”.
Ampliar el acceso a ellos no solo es humanitario sino también una política inteligente, agregó Fauci.
“Recibes un doble: salvas la vida de la persona que está infectada … y haces que sea prácticamente imposible para esa persona transmitir esa infección a su pareja sexual”.
Hasta que no haya una vacuna, los condones son la mejor manera de prevenir la infección del VIH, pero no todos los usan ni lo hacen todo el tiempo, por lo que se necesitan otras opciones.
Se ha demostrado que un combo de dos medicamentos utilizado para tratar a personas con VIH, vendido como Truvada por Gilead Science y en forma genérica en algunos países, ayuda a prevenir la infección cuando uno de los miembros tiene el virus y el otro no, pero la evidencia hasta ahora sido más fuerte para las parejas de hombres y mujeres.
Un nuevo estudio fue diseñado como una prueba del mundo real en cerca de 1.600 hombres gay en la región de París que estaban en alto riesgo de contraer el VIH debido a muchas parejas sexuales, renuencia a usar condones u otras razones. Les ofrecieron las píldoras preventivas, ya sea para uso diario, como se recomienda en los Estados Unidos, o “a pedido”, antes y después del sexo sin protección. Un poco más de la mitad eligió según demanda, y se hicieron pruebas cada tres meses para ver si habían contraído el VIH.
“Desde que comenzamos hace un año, no hemos visto una sola infección”, dijo el líder del estudio, el Dr. Jean-Michel Molina, del Hospital Saint Louis en París. “On-demand parece ser al menos tan eficaz como todos los días cuando se usa en la vida real”.
Nadie dejó de usar las drogas debido a los efectos secundarios.
“Ahora podemos tener tanta confianza en el poder del tratamiento como la prevención para las parejas homosexuales como lo hemos sido para las parejas heterosexuales”, dijo la Dra. Linda-Gail Bekker, directora de la conferencia del SIDA y subdirectora del Centro de VIH Desmond Tutu en la Universidad de Ciudad del Cabo en Sudáfrica.
El segundo estudio evaluó un enfoque diferente: mantener el virus de una pareja infectada gravemente reprimido con medicamentos contra el VIH, que se sabe que reduce enormemente el riesgo de propagación.
La Dra. Alison Rodger del University College London dirigió un estudio de 779 parejas de homosexuales masculinos en 14 países europeos donde un miembro no estaba infectado y el otro estaba tomando medicamentos para suprimir el VIH. Se les hicieron pruebas cada seis a 12 meses para ver si la pareja infectada todavía tenía el virus bajo control, y si el otro compañero lo había atrapado.
Después de una mediana de 18 meses, ninguno de los hombres infectados transmitió el VIH a su pareja, a pesar de alrededor de 75,000 actos sexuales sin preservativo. Hubo 17 nuevas infecciones por VIH entre los hombres que no estaban infectados cuando comenzó el estudio; las pruebas mostraron que esas infecciones se debieron a relaciones sexuales con alguien que no era el compañero en el estudio.
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