Quienes utilizan la palabra unidad y la utilizan haciendo lo contrario generan repulsión. Quien maneje la unidad con criterios mezquinos dan muestra de mucha ignorancia.
Es como usar el tapaboca en los ojos. Por razones como esa es que la política y la unidad se han convertido en malas palabras, en una burla y en una falta de respeto.
Cuando faltan pocos días para cerrar el proceso de inscripción de los candidatos a la alcaldía en el CNE, Vargas es uno de los peores ejemplos de unidad, con candidatos realengos, divididos, pendientes de robar fotos con Olivares, más que exhibir credenciales y propuestas.
Los partidos del Cogollo o del G4 son el peor ejemplo de unidad y el pueblo los mira con desdén preocupante.
Ese tipo de unidad es un desecho porque genera confusión e inestabilidad ante el desafío tan grande que tenemos por delante.
Hoy la única UNIDAD es con la gente, la que genera confianza y esperanza en ese conglomerado que sufre del pésimo gobierno y de un Cogollo Miserable cuya conducta solo ha servido para generar frustraciones y desesperanza.
Si se quitan el tapaboca de los ojos podrán ver a ese pueblo noble y llano que gime y ora por retener su derecho a ser feliz.
Ojalá estemos a tiempo
Ignacio Laya.