Caracas.- El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) pidió el apoyo del gobierno de Brasil para un plan de emergencia que permita revivir la producción agropecuaria de Venezuela de una situación “calamitosa”, que ha agudizado la escasez en medio de la crisis que enfrenta el país.
El director del IICA, el veterinario argentino Manuel Otero, se reunió esta semana con ministros del área en Brasilia para informarles de la crisis agroalimentaria venezolana y presentar un plan de reconstrucción que atienda la necesidad acuciante de la población.
La iniciativa del IICA contrasta con la acción de la FAO, que dos veces premió al presidente Nicolás Maduro por su combate al hambre.
“Los niveles de producción en Venezuela son un 90 por ciento inferiores a los que había hace 10 años, los niveles de ingesta calórica y protéica están por debajo del África subsahariana”, dijo Otero en una declaración de prensa emitida el martes.
“Ahora la situación ya es calamitosa. Están importando prácticamente todos los alimentos”, dijo Otero, quien asumió hace un año la dirección del principal organismo hemisférico promotor del desarrollo rural.
Brasil, por la fuerza de su agroindustria y como potencia mundial en la exportación de alimentos, tendría un papel central en cualquier esfuerzo por ayudar a la recuperación en Venezuela, señaló Otero.
Otero entregó al gobierno brasileño un informe de su contraparte en Venezuela, la Red Agroalimentaria de Venezuela (RAV), con “Propuestas para salir de la crisis agroalimentaria” que logren un abastecimiento de emergencia que garantice lo indispensable para que los venezolanos recuperen el mínimo necesario de energía y nutrientes en el primer año.
El plan busca recuperar los niveles pasado de producción de café, de cacao, caña de azúcar, frijoles y arroz. El nivel sanitario del ganado también preocupa porque no se está vacunando, por ejemplo contra la aftosa, y esto genera enormes problemas para los países vecinos Colombia y Brasil, dijo Otero.
Las expropiaciones de propiedades agrícolas que vienen ocurriendo desde el comienzo del chavismo han desestimulado mayormente la producción de alimentos, según el IICA.
Según datos de la RAV, 22 millones de habitantes hoy dependen de las entregas de alimentos del estado a través de bolsas de comida que básicamente contienen arroz, harina de maíz, frijoles y aceites.
Con información de Reuters | Panorama
