En pleno agosto la actividad política más que descansar lo que ha hecho es estar más presente que nunca. Las conversaciones de Juan Carlos primero y Corinna, el atentado a Nicolás Maduro, las elecciones recientes del presidente del Partido Popular, los Máster y su momento en los tribunales, y así hasta un largo etcétera de noticias, es un no parar.
Pero llega la vuelta al cole, el mes de septiembre está a la vuelta de la esquina, y con él, el pistoletazo de salida para las próximas elecciones municipales en España, se acabaron las excusas y la frase de “aún queda bastante tiempo”, el marketing político y la comunicación toman protagonismo en aquellos proyectos ganadores y con verdadera ambición.
Los partidos políticos y los candidatos que hayan hecho la tarea en estos tres años tendrán bastante ganado ante los electores, los que no, a correr y a intentar en menos de un año, preparar una campaña electoral cortoplacista que tendrá en el factor tiempo su peor compañero de viaje.
Es el ciclo de la vida política que se repite una y otra vez, partidos que entienden que es mejor mucha lluvia torrencial en pocos meses, que calar goteando poco a poco en la tierra de los campos del ciudadano, en muchas ocasiones por querer jugar con el factor sorpresa con el nombre de los candidatos, y en otras por no tener claro que discurso político quieren ofrecer al pueblo.
El candidato a gobernar una ciudad no puede aparecer faltando unos meses de una cita tan importante, el plan de comunicación política es una de las mejores herramientas en campañas permanentes, el elector está durante cuatro años activo y está buscando soluciones a sus problemas en la calle o en los medios online, intenta cubrir sus necesidades a diario, pero necesita saber a quien dirigirse siempre, y aquel que llega tarde significa, no llegar.
LA CUENTA ATRÁS PARA EL COMIENZO DE LA CAMPAÑA ELECTORAL
Pero esto no es todo, las estrategias políticas municipales en la gran mayoría de los casos no existen, el manual de campaña electoral municipal no se ha trabajado, el producto político al no estar definido tampoco ayuda a que se vislumbre lo que se quiere conseguir, o lo que es peor, saber donde están y quienes son mis posibles votantes, tres años perdidos son irrecuperables.
Queda muy poco tiempo, empezarán a salir a la luz los programas electorales, listas de candidatos, componentes de las planchas de partidos, cambios de siglas, fichajes políticos inesperados, encuestas vecinales, pactos posibles, negociación política, nuevos partidos, las redes sociales estarán más vivas que nunca.
Es lo que tiene el final del verano, empieza el fútbol otra vez, nuevas series de televisión, la moda otoño llega a las pasarelas y los bombones de Ferrero Rocher vuelven a las tiendas, hogares y familias enteras que ya se plantean a quien votar y dar su confianza, siempre y cuando lo puedan ver, lo puedan escuchar.
Isaac M. Hernández Álvarez
Consultor de Comunicación y Marketing Político