San Juan de los Morros.– Se entiende como amenaza velada, una intención de alguien que se cree con poder o de incidir en el poder para realizar una amenaza que perceptible o subliminalmente hace saber al amenazado, con la intención de desviar decisiones u obtener beneficios que generalmente afectan sus intereses.
Todos conocemos o hemos oído hablar del octogenario periodista José Vicente Rangel, un personaje de nuestras ultimas décadas de historia que ha sabido magistralmente mantenerse en el cenáculo del poder, pasando algunas veces desapercibido pero siempre utilizado por ese cenáculo cuando hay que torpedear a la oposición o promover cuando hay que promover al gobierno.
Para ello cuenta con una respetable vocería que se la otorga haber ocupado altos cargos en este gobierno, llegando a ser vicepresidente cuando Hugo Chávez y actualmente uno de los principales asesores de Maduro.
Sin duda su faceta política es extraordinaria; desde la caída del dictador Marcos Pérez Jiménez hasta la fecha (60 años), se ha mantenido en comunión con el gobierno, en una primera etapa; con los 40 años de la denominada cuarta república y en una segunda etapa, de manera abierta y solidaria con la llamada revolución o socialismo del siglo 21, bien sea haciendo el papel de opositor o en contubernio con sus principales actores, como es hoy en día el caso.
Me permito adelantar la identificación previa de este personaje, a fines de traer a colación la Amenaza Velada que el periodista le hace al empresario Lorenzo Mendoza en su programa televisivo de fecha 14 de enero 2018, concretamente en la parte denominada confidenciales, donde hablando de un posible candidato de la oposición producto de un consenso expresa: abro comilla ” Quizás el que reuniría consenso es el empresario Lorenzo Mendoza a quien en lo personal parece gustarle la idea pero las objeciones más importantes (según el periodista) provendrían del entorno familiar de Mendoza, según se ha sabido no están de acuerdo con una decisión de esa naturaleza,- Y aquí la amenaza – porque lanzarse como candidato (afirma) expondría al complejo industrial y comercial del grupo polar”. Cierro comilla.
Como puede leerse en el último párrafo el periodista lanza sin ton ni son, sin siquiera explicar nada, el peligro que correría Lorenzo Mendoza de perder su patrimonio aquí en Venezuela en caso de que decida aspirar la presidencia de la república. Ahora bien cabe la pregunta porque un venezolano ajustado a la constitución y a las leyes pondría en peligro sus bienes si ese venezolano decide aspirar a la presidencia de la república; es condición ahora en este país no poseer bienes de capital para poder optar a la presidencia de la república, porque de lo contrario los pondría en peligro. Porque este reconocido periodista del gobierno asegura que eso sucedería?
Este tipo de amenazas deberían ser consideradas seriamente, y mucho más seriamente proviniendo de un personaje con mucho peso en las estrategias de este gobierno, la comisión de derechos humanos debería adelantarse en las investigaciones.
Qué pasaría si realmente Lorenzo Mendoza decide intervenir como candidato en las elecciones presidenciales, le confiscarían acaso sus empresas. Lo cierto del caso es que la opción de que Lorenzo Mendoza sea candidato está en la palestra pública, todas las encuestas sin el haber dicho que aspira a ser candidato lo señalan como la primera opción, doblando y más al que lo secunda.
Su propia estrategia ha sido la de mantenerse en silencio ante tantos señalamientos positivos por muchos y negativos por pocos. Desde luego es una posición inteligente, el gobierno no ha dado garantía de querer jugar limpio, se requiere un nuevo CNE y la participación de muchos observadores internacionales para el desarrollo de estas elecciones muy importantes para el país.
La carta de Lorenzo Mendoza es una esperanza muy afincada en el corazón de los venezolanos, este país está quebrado y necesita un buen gerente para sacarlo adelante, Lorenzo reúne esas características, o en su defecto algún outsider con esas condiciones, sin primarias, por consenso. Con esa fórmula no podrán atajar al pueblo, ni con amenazas, ni con nada.
J.V.Flores Muñoz