El compromiso de un gobierno con sus gobernados, lleva implícito siempre en su programa y en las esperanzas de los ciudadanos, VIVIR MEJOR. Ese es el verdadero motivo que hace movilizar a la gente para ratificar o cambiar a gobernantes, la esperanza de VIVIR MEJOR, de tener un trabajo u oficio digno, que le garantice no solo una cómoda subsistencia y los de su familia, sino cubrir diversos gastos complementarios para la vida como comprar la ropa o vestido requerido, adquirir los productos de aseo y cuidado personal, tener su propia vivienda, los equipos necesarios en el hogar, respaldar el estudio de sus dependientes, cubrir si es el caso los gastos en medicina, algo para la recreación y desde luego, sus respectivos ahorros que servirían para cualquier imprevisto o alguna inversión oportuna. La garantía de corresponder a todos estos gastos resume lo que socialmente podemos definir como vivir bien. Esto es la gran diferencia que existe entre un país bien administrado y un país mal administrado.
La forma en que se ha conducido este gobierno llevándonos a la pobreza, la mala vida, la situación estresante, las humillaciones y el desespero, no creo que puedan llegar a tener perdón; destrozar la esperanza de miles y miles de jóvenes que venían formándose en nuestras universidades y que han tenido que migrar, no es una acción para el perdón; someter a una muerte segura a pacientes de cáncer, diabetes u otra enfermedad calificada por falta de medicinas , no es una acción para el perdón; mantener a la inmensa mayoría de los venezolanos diligenciando única y exclusivamente los alimentos para remediar el hambre, tampoco es una acción de perdón; montar un proceso electoral evidentemente parcializado, donde hay total control del sistema electoral e influencia determinante en el llamado plan república, con el fin premeditado de mantenerse en el poder a pesar del gran repudio de la mayoría de los venezolanos, es otra acción que no consigue el perdón.
Sabemos que los autores de este destrozo; no andan cristianamente en búsqueda de ningún perdón, a ellos esto les sonara muy cursi, pero también debo decir que yo tampoco me refiero al perdón cristiano, que desde luego es el más sublime y más importante acto de misericordia; potestad única del Dios padre, me refiero a la respuesta que en su oportunidad y en su momento tendrán que dar esos millones de seres actualmente sometidos por el producto de la ineficacia y negligencia de este gobierno que preside Nicolás Maduro y su entorno.
Alguien sometido a la oscuridad busca la luz; cuando los caminos se resquebrajan se buscan vías alternas, es una actitud innata en el ser humano la búsqueda de la paz, y los modos de vivir siempre más cómodo.
La ratificación de Maduro el próximo 20 de mayo, consolidando con esto su estrategia perfectamente elaborada para mantenerse en el poder, de ninguna manera será una solución a esta oscuridad, por el contrario la veremos más negra. Pero este acto de ventajismo, de viveza y antidemocrático, en ningún momento debe resquebrajar la definición de lucha y búsqueda de una Venezuela libre y de oportunidades, donde la esperanza de VIVIR MEJOR sea una realidad.
El frente amplio Venezuela libre, es un gran instrumento de participación para el logro de este objetivo, la sociedad civil organizada con los partidos políticos de corte democrático hacen causa común para respaldar al ciudadano en todas sus iniciativas de lucha por un país mejor; hoy y mañana solicitaremos elecciones libres y transparentes hasta lograrlo, en esto no estamos solos, nos acompañan en este planteamiento más del 80% de los venezolanos y toda o casi toda la comunidad internacional, con constancia y todos unidos lograremos nuestro gran objetivo: VIVIR MEJOR.
