Ha dicho el escritor y filósofo francés Henry Bars, en su estudio: ” La Política Según Maratain ” , capítulo III, sobre la ” Naturaleza de Política ” y concretamente, en sus consideraciones a la concepción maquiavelica, expresa: ” El rasgo dominante de la política maquiavelica es el cinismo. El maquiavélico no admite ninguna subordinación intrínseca –y aun quizás menos –intrínseca de la política a la moral ” ( Henry Bars: ” La Política Según Maritain ”. Pag. 58. Editorial Nova Terra, S.A. Habitalet, Barcelona, España. 1963 ).
” Bayonetas Sobre Venezuela ” es, un libro escrito bajo condiciones muy azarosas y extremadamente difíciles, para su autor Valmore Rodriguez, en momentos, en que estaba secuestrado en la antigua ” Cárcel Modelo ” , de Caracas; y su carcelero era, el general Marcos Pérez Jiménez, nuevo amo espurio del poder en Venezuela; desde el 24 de noviembre de 1948; año éste, que preconizo un cobarde golpe de Estado al gobierno del maestro Gallegos, hasta el año 1958.
En mi modesta opinión y salvo mejor criterio; para mí no es una obra auto biográfica, muy merecida por cierto; dentro de mi perspectiva es, un libro de ensayo, que recoge las terribles vicisitudes de un país, que venía construyendo un despeje de la ignorancia y pobreza hacia un estadio de democracia, libertad y prosperidad.
Pero eso fue truncado, por el cinismo de unos coroneles arteros y traidores, que se hicieron del poder.
Valmore Rodriguez, fue un hombre, que le tocó no solamente ser actor de ese drama político que se desencadeno; sino que lo vivió en intensidad y riesgo, hasta que le costó su propia vida; porque a la sazón, él presidente. del Congreso Democrático, que la nueva dictadura ahogo.
Hoy, quiero sumarme a quienes en este mes de julio han testimoniado su admiración y respeto, cuando se han cumplido 65 años de su muerte ocurrida en Chile, donde se encontraba asilado, pobre y enfermo.
El murió el 10 de julio de 19555. Ese reconocimiento nace para un hombre político, formado en la adversidad, a un intelectual profundamente honesto, que no solamente sembró los caminos de Venezuela, de esperanzas hacia un destino mejor; sino porque junto a otros ( Rómulo Betancourt), construyeron plataformas de luchas cívicas; como el Partido Democrático Nacional (P.D.N.) y Acción Democrática; hoy estremecida por un traidor, cultivado en el jardín del gangsterismo político.
Precisamente, Valmore Rodríguez, dejó con su libro y cuyo título sirve de pórtico a la Torre de Babel; puso al desnudo la bajeza y la ignominia, que no solamente se abatió contra el gobierno legítimo de Acción Democrática; sino contra una nación entera.
En una carta a la Junta Militar, Valmore Rodríguez, le pregunta: ” Quién instó a delinquir? Quién ha delinquido ? Puede el crimen originar un estado de legítima juricidad ? ” Desde luego, que quienes perpetraron el crimen contra el Estado Democrático y contra la Constitución Nacional fueron, los coroneles, para ese momento, encabezados por Marcos Pérez Jiménez y Carlos Delgado Chalbaud.
En cuanto a la tercera interrogante; hay que decir, que el crimen no puede originar un acto jurídico legítimo, porque esa perversión política; el golpe de Estado es, una acción anti jurídica a lay luz de los preceptos constitucionales, de la Carta Magna, nacida de la voluntad popular.
De Valmore Rodríguez, expresó Alberto Carnevali, en el prólogo que escribiera para su libro: ” La emoción de mi solidaridad partidista se halaga singularmente haciendo leal testimonio de una de las más abnegadas vidas al servicio de la causa democrática de mi patria.
Valmore Rodríguez es, después de Rómulo Betancourt, el dirigente más combatido de mi partido, porque es uno de los más antiguos combatientes en la línea de fuego, de donde no se ha apartado jamás” ( Alberto Carnevali: Extracto de su prólogo al libro de Valmore Rodríguez: ” Bayonetas Sobre Venezuela ” . Pág. 14. Editores e Impresores Beatriz de Silva, S.A.. México. 1950 ).
Ni en una línea de su prólogo, Alberto Carnevali, exageró los valores humanos, que acompañaron siempre a Rodríguez, desde el momento en que vio la luz por primera vez, en San Felix, estado Falcon, en el año 1900.
Ya desde los 15 años, le estaba dando lata a la dictadura del general Juan Vicente Gómez; ya para el año 36, estaba confrontando al heredero y general Eleazar López Contreras; fundando los primeros sindicatos petroleros; fundando organizaciones cívicas; fundando periódicos; dirigiendo programas de radios y escribiendo y publicando libros de poesías o en revistas literarias.
La valentía política de militante de Valmore Rodríguez, lo llevó desde la cárcel a combatir los preparativos de una operación electoral, que estaba cocinando la dictadura perezjimenista, que por cierto, tiene una similitud, con la farsa electoral, que está preparando el usurpador Nicolás Maduro.
Expresa, Valmore Rodríguez: ” Se han comprometido ustedes en declaraciones… a llamar al país a elecciones. Unas elecciones idílicas, en que no habrá luchas partidistas, ni sectarismo, ni agitación, ni parcialidad oficial en favor de candidato alguno… con sus dirigentes perseguidos y en la cárcel o el exilio… con el propio partido disuelto por decreto militar. Qué garantías espera tener ? No tendrá ninguna. No sería por consiguiente, parte en la contienda electoral. En tales circunstancias, una consulta electoral no tiene sentido. Como no sea el de buscarle una salida dictatorial a la insostenible posición de los integrantes de la Junta Militar. No serían elecciones sino una mascarada ” ( Valmore Rodríguez: ” Bayonetas Sobre Venezuela ” . Pág. 121. Editores e Impresores Beatriz de Silva, S.A. México. 1950 ).
Éstas enseñanzas cívicas, de varonia proba, de honestidad política, de lealtad a los principios y banderas de redención social y libertarias, sostenidas por el líder histórico adeista Valmore Rodríguez es, lo que han traicionado los alacranes, como Bernabe Gutiérrez, al entregarse de manera arrastrada, para convalidar un fraude electoral del usurpador a cambio de canongias vituperables y con el sueño, que de llegar al parlamento, se cotizara mejor su alma de traidor y de maquiavélico venal.