Caracas.-Los colores regresaron a la alfombra roja de los globos de oro. Y es que en la edición 76 de los premios de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood los trajes negros que lucieron unas pocas estrellas respondieron más el glamour que exigía la velada que la necesidad de levantar las banderas de la respuesta, ni por las víctimas del racismo y por los abusos sexuales, entre otras cosas, las producciones alusivas y estas llagas sociales.
Luego de una larga y aburrida introducción una carga de Andy Samberg y Sandra Oh, Lady Gaga y Bradley Cooper anuncia el primer premio de la noche, que ganó Michael Douglas como Mejor Actor de Comedia o Musical por El Método Kominsky, creado por Chuck Lorre, El padre de la teoría del Big Bang, y premiada también como Mejor Serie de comedia o musical.
La serie Los estadounidenses, sobre los agentes de la KGB que llevan una vida en la misma familia de la misma época en el año de los ochenta, finalmente recibió el reconocimiento de los corresponsales de Hollywood al recibir el Globo de Oro como Mejor Serie Dramática.
Émgar Ramírez, en la categoría de la competencia, Mejor Actor de Reparto en Miniserie o Película para Televisión, ganó Ben Whishaw por A Very English Scandal, American Crime Story. El asesinato de Gianni Versace no se llevó en el blanco de los Globos de Oro: su protagonista, Darren Criss, fue reconocido como Mejor Actor y la producción de Netflix se encumbró como el Mejor Miniserie o Película para Televisión.
Más suerte que Ramírez tuvo la veterana Patricia Clarkson, premiada como Mejor Actriz de Reparto en Miniserie o Película para televisión por Sharp Objects.
Antes de la leyenda, la talentosa Patricia Arquette y el escenario de los Globos de Oro para recoger el trofeo como Mejor Actriz en Miniserie o Película para Televisión por Escape en Dannemora. Y mucho antes que ella hizo lo propio Richard Madden para obtener un premio como Mejor Actor en serie de Drama por Bodyguard.
Sandra Oh pasó de presentadora a ganadora cuando se entregara el trofeo de la HFPA como Mejor Actriz de Drama por su convincente trabajo en la serie Killing Eve. Eso sí, que siga actuando.
Una de las favoritas de los expertos en televisión, Rachel Brosnahan, no se obligó a cambiar de opinión, ya que los corresponsales de Hollywood se reconocieron con la mejor actriz de comedia y musical de La maravillosa señora Maisel.
Juntos y revueltos
Los ganadores en el área del cine se pasaron por delante de los micrófonos cuando Regina King recibió el Globo de Oro a Mejor Actriz de Reparto por Si Beale Street podía hablar, la película de Barry Jenkins (Luz de la luna) en la encarna una mujer Intenta demostrar la inocencia de tu esposo antes que tu hija.
Uno de los reconocimientos más merecidos y los momentos más emocionantes de la gala lo protagonizó Glenn Close, premiada como Mejor Actriz Dramática por su minuciosa interpretación de la atribución de un Premio Nobel de Literatura en La Esposa.
Por su encarnación más física que emocional de Freddie Mercury en el filme Rapsodia Bohemia, Rami Malek recibió el Globo de Oro como Mejor Actor Dramático, y la biopicía convencional de Bryan Singer, paradójicamente, el que se ve el más importante de la noche: el de Mejor Película Dramática.
Como Mejor Actor de Reparto fue galardonado Mahershala Ali, quien encarna en el filme El Libro Verde es un músico negro que recorre el sur de los Estados Unidos en la compañía de un chofer de piel blanca en los años más duros del odio racial, la sesenta.
El Libro Verde, además, no ganó el premio a Mejor Guión, que recibió sus autores, Peter Farrelly, Nick Vallelonga y Brian Currie, sino más importante en su ámbito: la Mejor Película de Comedia o Musical.
Al anunciarse la ganadora en el rubro de Mejor Canción, Lady Gaga regresó al escenario con su bello pero aparato de vestir para acompañar a los coautores de Shallow, tema de la película Nace una estrella.
Christian Bale, quien se encuentra en su casa el trofeo a Mejor Actor en comedia o musical Por su trabajo en la película Vice, donde encarna al ex vicepresidente de Estados Unidos, Dick Cheney. Mucho más imprevisible, aunque muy merecido, fue el que recibió Olivia Colman como Actriz de comedia o musical por The Favorite, del realizador griego Yorgos Lanthimos.
Catherine Zeta Jones y Antonio Banderas gritaron al unísono “Roma”, cuando anunciaron a la ganadora del Globo de Oro como Mejor Película en Lengua Extranjera. Dijo su director, Alfonso Cuarón: “Esta película no ha sido posible sin los colores que he hecho lo que soy”, sin sospechar que los minutos después le tocaran la mesa de nuevo para recoger las manos de Harrison Ford el premio a Mejor Director, también por Roma.
Con pocas sorpresas y algunas decepciones, los Globos de Oro dieron el pistoletazo de partida para una temporada de premios que, una excepción de Roma -de la que parece imposible dejar de hablar-, no despierta mucho interés.
Fuente
El Universal