Sorprendidos y consternados son las palabras que se me vienen a la mente al recordar el fallecimiento de Franco Gerratana ocurrido esta semana.
Franco fue un empresario enamorado de su pueblo, por eso ingresó a la política. Alcalde, abogado y hombre de familia.
Su muerte duele, pues se había convertido en parte de esa historia local. Franco rompió esquemas en el marketing político: “Trabajando más que hablando”, el eslogan de su gestión pasó a ser de dominio público. Cosa no muy común con las frases políticas.
Un alto porcentaje, incluso quienes lo adversaban, reconocieron que había ejecutado “la mejor gestión”. Entre los ocho alcaldes que han gobernado el municipio, es el más recordado.
Fue el alcalde más atacado durante su gestión. La orden era sabotear cualquier cosa buena que intentara hacer. Como capos de mafia y malandros sin almas, algunos arremetieron contra él.
Económicamente no tenía ninguna necesidad. Creó una televisora, una radio. Mantuvo su empresa y construyó una manera de hacer política. Negar todo esto sería mezquindad.
El hombre del perrito
Juan Crisóstomo Orasma, murió esta semana a los 77 años. Profesor jubilado, deportista y personaje popular de San Juan de los Morros.
A diario era visto en las calles, hasta que una enfermedad lo sacó de circulación y lo envió a su casa.
Orasma nos deja una lección. Enfermó: con anemia, producto de transfusiones que le habían hecho, le faltó la visita y el saludo de mucha gente.
Palo contra el Polo
La decisión del TSJ de destituir a Rafael Uzcátegui y nombrar nuevas autoridades es una vergüenza. No habían pasado 24 horas de haberse hecho una solicitud por parte de Ilenia Medina, cuando el tribunal decidió entregarle el partido.
Uzcátegui ya había acusado a Ilenia Medina de “traidora, vendida y gobiernera”. La razón de esta medida es un castigo, ante la decisión del PPT de ir a elecciones con candidatos por separado.
Uzcátegui responsabiliza directamente al presidente Maduro de esta decisión. Partidos de oposición y afines al gobierno son tratados por igual.
El Polo Patriótico, esa entelequia que nunca funcionó, necesita mantenerse, aunque no sirva. Pero simula una unidad revolucionaria, a la fuerza, pero unidad al fin. Numéricamente da muy poco, pero propagandísticamente ayuda.
Tupamaros, Pepetistas y Upevista son víctimas en esta ocasión. Sus siglas se plegaran a lo que decida “El hermano mayor”.
Retorno a clases
Todos andamos como muy sensibles. Bastó solo que el presidente planteara estudiar alternativas para iniciar el año escolar, para que le cayeran a palo.
Es lógico que deba plantearse un régimen semipresencial. El régimen a distancia solo funciona por temporadas, no puede ser eterno.
Una cosa son las malas condiciones de los docentes y de un ministro incapaz, pero otra muy diferente es el derecho al estudio. Ambas luchas deben ir de la mano, solo así el maestro que reclama obtendrá el apoyo del representante.
Desaparecido
Carlos Lanz se convirtió en el gran ignorado. Todos pensaban que en cualquier momento el gobierno nacional se pronunciaría sobre su caso. Eso no ha pasado.
En una alocución Maduro homenajeó a Dario Vivas y al Chino Kham, nada dijo sobre Carlos Lanz.
Familiares y diversos grupos y frentes han planteado insistentemente su reclamo ante la desaparición de este.
Elecciones en los Estados Unidos
El 3 de noviembre de este año habrá elecciones en los Estados Unidos. Trump no la tiene nada fácil. Antes del coronavirus el panorama era otro.
Los demócratas van con todo, Obama se incorporó activamente contra Trump. Trump tiene el apoyo de sectores radicales, los que defienden el uso de armas y antiinmigrantes.
Parte de la oposición venezolana aspira un triunfo de Trump pues creen que “los demócratas no presionarán a Maduro ”.
Tuiter no quiebra hueso
Tuiter crea tendencia, destroza a cualquiera, distorosiona o informa lo ocurrido. Tuiter somos todos.
Pero ¿ a quiénes llega tuiter? ¿le gana tuiter a la radio? el periodista Kiko Bautista dice que tuiter llega a 15% de la población.
Lo cierto es que en tuiter, grupos de whatsapp y facebook, predomina una visión crítica, alguna extremista y radical.
Aunque crean tener fuerza, la batalla en redes se queda allí, es virtual. No va a la calle. Es la forma ideal para quien quiera mantener el poder.
El gobierno tiene a un alto porcentaje pegado en sus casas a un teclado, mientras la calle está reservada para ellos. Es así de sencillo.
Orlando Medina Bencomo / El Tubazo Digital