1.- Las primarias es clavo pasado; el gobierno, haga lo que haga, no las podrá desaparecer, pues sólo las organizaciones sociales y los partidos que las convocaron podrán anular su resultado.
Expresamos nuestro voto en ese evento porque, entre otras razones, ellas simplificaban el proceso de unidad de la oposición, por el que apostamos.
Hoy María Corina tiene la primera opción para ser la abanderada presidencial de la oposición, si su equipo transita el camino de la paz con el que estamos casados la mayoría de los venezolanos.
2.- Por ello, de entrada, anotamos que no se puede permitir que la emoción, el triunfalismo y el sectarismo nos conduzcan nuevamente a la locura. La lista de momentos de demencia por los que hemos atravesado es larga.
Estos episodios se iniciaron con las ilusiones que despertó Irene Saez, frente a un Chávez de 3% ,y fue derrotada.
Pero, recordemos las más recientes. No podemos olvidar que para el 2015, cuando ganamos la Asamblea Nacional, aplaudimos al escuchar que en seis meses estaría abierta la brecha hacia el poder, y Ramos Allup llenaba calles en todo el país, pero sin darnos cuenta su liderazgo se evaporó.
Luego para 2019 Juan Guaido‘ se nos transformó en presidente interino, con respaldo internacional, y las emociones, que se formaron al escuchar que todas las opciones estaban sobre la mesa, también se disiparon creando una gran frustración que matuvieron arrinconadas las esperanzas de cambios en los últimos años.
3. – Hoy, en medio de una oposición dividida, con la mayoría de sus dirigentes y de sus partidos desprestigiados y escaso liderazgo social, estas elecciones primarias movilizaron a la oposición, recuperaron la confianza en el voto, potenciaron la convocatoria a la unidad y retornaron la emoción, factores, entre otros, necesarios para lograr el cambio.
4.- Sin duda, la crisis se ha prolongado , y el descontento entre la oposición es mayor; por lo que comprendemos la inconformidad y la indignación que nos acompaña, pero la política no se puede adelantar con fanatismo ni con odios.
Hay que tener cabeza fría, para que las acciones logren acumular la fuerza necesaria que permita doblarle el brazo a la cúpula del madurismo en sus pretensiones antidemocráticas de impedir la participación de María Corina en las elecciones presidenciales.
5.- Los estudios de opinión nos señalan que el pueblo se cansó de la confrontación. De allí que, la primera linea que hay que levantar es la del matrimonio con la RUTA DEMOCRATICA y la importancia del voto como arma para el cambio político. La abstención y la violencia solo sirven al gobierno, y deben ser rechazadas con mucha fuerza por todo el liderazgo opositor. El grito tiene que ser: llueva, truene o relampaguee hay que votar.
6.- La segunda es trabajar por la UNIDAD. En estas primarias votaron fundamentalmente opositores, quienes atropellados por la crisis, y sin medios para la movilidad, por la debilidad de las organizaciones políticas, salieron por cuenta propia a expresar su inconformidad contra el gobierno de Maduro. Y en mi opinión, de las oposiciones, quienes sufragaron, esencialmente, fueron los seguidores de la Plataforma Unitaria, factor convocante de las primarias, que viene de obtener 2.255. 740 votos en las elecciones regionales de 2021.
De tal manera, que para poder ganar, ahora es cuándo se necesitan más voluntades, y sobre todo una avalancha de votos para poder cobrar.
Asi que si ahora existe una comisión para dialogar con el gobierno, es conveniente crear otra entre las oposiciones para buscar la unidad. En fin, si el gobierno trabaja para dividir a la oposición, nosotros debemos trabajar para conformar una gran alianza de los descontentos con Maduro.
7.– El tercer gran esfuerzo que debe realizarse es encontrarse con el CHAVISMO DESCONTENTO. Esa corriente está a la expectativa. Todavía no nos acompaña.
Fueron muy pocos los que salieron a votar en las primarias. Y aún hay unos cuantos opositores que continúan con agresiones hacia este sector, pues no comprenden que el deslinde de esta facción es con Maduro.
No entienden que el 52% de los venezolanos piensa que si Chavez estuviera vivo no existiera la crisis , por lo que es evidente que los ataques a su líder nos bloquea con ese pueblo chavista que hoy no aprueba la gestión de Maduro.
8.- El cuarto tema que debe estar en la narrativa y que tenemos que atender es la TRANSICIÓN. En esta tarea hay que persuadir al activismo opositor para que le baje dos a sus deseos de venganza.
El madurismo tiene un amplio poder institucional que obliga a que la transición es con ellos. Es decir, hay que disminuir, a quienes ejercen el poder, el costo de salida, Simón García dixit. Este aspecto es básico para gobernar en paz y avanzar hacia la democratización del país. De allí que, la polarización y la confrontación tienen que desaparecer, y dar paso al diálogo y a la reconciliación entre los venezolanos.
9.- La quinta línea de trabajo es la de ensamblar el PROGRAMA DE GOBIERNO. Sobre este importante aspecto han estado circulando algunas propuestas. Los sectores más interesados en la política lo exige, y hay que presentarlo colocándolo en sintonía con las necesidades más sentidas de la población, vale decir, apegado a la ESPERANZA de la mayoría de quienes vamos a votar -ciudadanos mayores de 50 años- cuyo sueños es estar bien el resto de vida y que nuestros familiares regresen.
Es decir, la MARCA de la campaña debe ser CONTRA EL HAMBRE Y POR MAS PLATA , deseos de los pobres por ingresos, que conforman el 70 % de la población venezolana.
Máximo Blanco / El país y su economía