Por razones políticas vemos ahora a ciudadanos politizados que desde hace muchísimo tiempo venían exigiendo, reclamando y rezongando mayor seguridad para los venezolanos, incluso, exigiendo más acción de los cuerpos de seguridad; de golpe y porrazo se muestran súper indignados cuando las policías realizan su trabajo para proteger a la población.
Sucintamente la situación fue así: unos choros pretendían robarle una fuerte suma de dinero a un empresario cuando salió del Centro Comercial Ciudad Tamanaco (Ccct), se habló de un secuestro pero la acción de las FAES comenzó por una denuncia de robo; aunque no se descartó que se quisiera cometer el segundo delito.
Un entrépito (que siempre los hay en un lugar y momento oportuno) testigo de la acción hamponil se le ocurre poner sobre la pista a la policía para que tome cartas en el asunto, se presenta las FAES, estos siguen un carro tipo rústico, los delincuentes se percatan que los siguen y abren fuego contra los policías, le quitan la espoleta a una granada de mano con tan mala suerte para ellos que explota muy cerca (algunos medios dijeron que dentro del vehículo) causando serias heridas a los malandrines.
Resultado. La operación finaliza con cuatros malhechores muertos, dos se dan a la fuga y el empresario sano y salvo, todo bien hasta que entra en acción la mal llamada “prensa libre” que son financiados por el siniestro imperio gringo por orden del desquiciado que mal gobierna a los EE.UU.
Desde radios privadas, portales Web, impresos, red social, etc., empieza una encomiable labor para favorecer a los adeptos de la oposición para que se construyan un discurso político, campaña cargada de mentiras y críticas muy duras contra la acción de los policías.
Estos “comunicadores” prepagos publican videos manipulados contra la operación policíaca en ese suceso.
Bastó que el autoproclamado presidente Guaidog criticara lo sucedido vía twitter (“la acción violenta del FAES”) para que se pusiera en marcha una legión de “comunicadores” para reprender la acción policial y manipular desvergonzadamente sobre lo acontecido.
Estos “comunicadores” enmudecieron toda opinión surgida sobre quienes piensan que la acción policial estuvo muy bien y que cumplieron con su trabajo de seguridad.
En Venezuela nació una nueva supremacía comunicacional que no es la del rrrégimen, sino de los medios de comunicación privados que suprimen de su programación a todo ciudadano que no repita las infecundas y mayoritariamente tontas opiniones de Guaidog.
Politólogo Álex Vásquez Portilla
