Caracas.- Los Celtics ganaron el primer partido de la final de la Conferencia Este ante los Cavaliers (108-83) con una exhibición defensiva que engulló a su rival, al que dejó en muchos momentos en evidencia.
En ataque volvió a realizar una administración ejemplar de sus recursos -jugó casi todo el partido sólo con ocho jugadores- con Jaylen Brown (23) y Al Horford (20) imparables, y con la ayuda puntual de Morris (21+10) y Tatum (16).
Los Cavs completaron una primera parte nefasta, llegando a perder por 28 puntos (61-33). Esta vez ni siquiera LeBron James, bien defendido por Horford, Morris, Ojeleye…, pudo cambiar el curso de los acontecimientos.
El orgullo de los verdes engulló a unos Cavs en los que sólo ‘King’ James (15+7+9), desdibujado toda la noche, y Kevin Love (16+8) se libraron del suspenso.
Los Celtics sentaron las bases del triunfo en un inicio de partido espectacular (21-7, min 7), con Horford (11) poniendo en pie al TD Garden. Todo lo contrario de unos Cavaliers atenazados por la defensa verde y erráticos en ataque con 2/11 en tiros -LeBron había tirado sólo dos veces- y 0/5 triples. Y encima no paliaron ese desatino en defensa, con una laxitud impropia de un aspirante al título y que facilitó la tarea ofensiva a los Celtics.
Exhibición de Jaylen Brown
Jaylen Brown, espectacular, tomó el testigo de Horford para ampliar la ventaja de su equipo (32-11). Los Cavs amagaron con remontar con un arreón de LeBron (42-27), pero los Celtics devolvieron a sus titulares a la cancha y marcaron la máxima ventaja poco antes del descanso (61-33).
El partido estaba visto para sentencia. Los Cavs llevaban entonces 14/42 en tiros, y los Celtics, sólo entre Brown, Horford y Tatum, 14/20. Ya no hubo partido. este martes, segundo choque en Boston.
Fuente
Arch Bell