Cúcuta.- Decenas de guardias nacionales lanzan gases lacrimógenos para tratar de dispersar una protesta de varios centenares de habitantes de Santa Elena de Uairén, estado Bolívar, que exigen la reapertura de la frontera por Brasil para el ingreso de la ayuda humanitaria prevista para el sábado.
La información la dio a conocer el diputado a la Asamblea Nacional (AN), Ángel Medina, a The Associated Press.
La protesta se da horas después de un violento enfrentamiento entre militares e indígenas en una comunidad de la etnia pemón en el parque nacional de la Gran Sabana, cercana a Santa Elena de Uairén, que dejó una indígena fallecida por el disparo de un fusil y otros 22 indígenas heridos, la mayoría por disparos de armas de fuego.
Medina dice que debido a la escasez de medicamentos e insumos que hay en el hospital de Santa Elena de Uairén seis de los heridos de bala, que se encuentran en condición delicada, debieron ser trasladados en ambulancia hacia la ciudad brasileña de Boa Vista para recibir atención médica.
Por otra parte, Guaidó condena el incidente ocurrido en la localidad suroriental de Gran Sabana y denuncia que dos efectivos “dispararon ráfagas contra (indígenas) pemones”, lo que originó la muerte de una mujer por disparo de un arma de fuego y dejó 12 heridos. “No quedará impune”, expresó el político.
Con información de la AP | El Universal