Caracas.-Para los miles de fanáticos rusos que abarrotaron los estadios, y para los otros miles que lo siguieron desde las pantallas, fue un bonito cuento de hadas que su selección, la anfitriona del Mundial, les brindó tras eliminar a España en octavos de final.
“Es duro (…) estamos muy tristes de que el cuento de hadas para nuestro país se haya terminado. No pudimos ganar, nos vamos para casa”, declaró Denís Chéryshev al final del partido contra Croacia.
Sin embargo, los jugadores y los fanáticos rusos pueden estar orgullosos de lo conseguido en este Mundial: Eliminaron a uno de los grandes favoritos al título (España).
El título del diario Sport Express, el diario deportivo más leído del país europeo, fue: “¡Campeones de nuestros corazones!”, dejando claro que todo el país está orgullosa de la actuación de selección.
Nadie daba nada por el anfitrión horas antes del partido inaugural ante débil Arabia Saudita. No en vano era el equipo con el peor ránking de todo el torneo, pero rompieron todos los pronósticos.
“Sinceramente, antes del Mundial éramos escépticos (…) las primeras victorias pensamos que eran fruto de la casualidad, que los rivales eran débiles (…) el momento clave fue el partido contra España”, declaró una exultante Yelena Isinbáyeva, atleta rusa retirada y orgullo de la nación.
Pasando de toda la euforia generada por lo ya comentado, la buena noticia es que lo conseguido en el Mundial puede transferirse a la liga de fútbol ruso, la cual muchos afirman tiene un futuro garantizado. Además de una nueva generación de jugadores, cuentan con doce estadios mundialistas nuevos, más los del Krasnodar y el CSKA, que a buen seguro acogerán en los próximos años la Eurocopa de naciones.
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