Australia.- Es un secreto a voces en los vestuarios del circuito que Roger Federer hace tiempo que se plantea su retirada de las pistas. Lo que tiene claro el suizo, para muchos el mejor jugador de la historia, es que quiere dejarlo siendo competitivo. Los resultados de Federer en los ‘Grand Slam’ en el último año no ayudan a que Roger se vea mucho tiempo más en la ATP.
Para encontrar la última vez que estuvo en la semifinal de un ‘major’ hay que remontarse a la pasada edición del Open de Australia. No jugó Roland Garros, torneo al que le gustaría volver, cedió en los cuartos de Wimbledon y una ronda antes en el US Open, con Kevin Anderson y John Millman de sorprendentes verdugos.
Stefanos Tsitsipas, el más destacado de la ‘Next Gen’ junto a Alexander Zverev, tiene armas para ganar a cualquiera, también a Federer. Pero la forma con la que superó este domingo al helvético en los octavos de Australia, con un tanteo de 6-7(11), 7-6(3), 7-5 y 7-6(5), deja la sensación que el campeón de 20 grandes difícilmente moverá ese palmarés.
Al griego le había podido la sombra de la leyenda en el precedente más reciente entre ambos en la Copa Hopman. Dominaba el ‘tie break’ del primer set por 2-6 y lo acabó perdiendo. En la Rod Laver Arena de Melbourne fue otra historia.
Tsitsipas, que forma parte del grupo de competición de la Academia Mouratoglou en Niza, creyó siempre en la victoria, incluso cuando se vio con una manga por detrás en el marcador. Federer malgastó muchas opciones de rotura en el segundo set y lo pagó caro.
Stefanos pedía la presencia del fisioterapeuta para paliar sus calambres, producto no sólo del cansancio sino de la tensión del momento. La grada, como no, iba con el mito. Sin embargo, su tenis ya no es el que era cuando el reloj va sumando minutos a sus partidos. Había llegado a la cita invicto, con cuatro triunfos en la Copa Hopman y tres en el ‘major’ de las antípodas. Al primer partido que se le complicó acabó hincando la rodilla.
De momento, Roger, que resta 1.802 puntos al no defender la corona australiana, desciende hasta el sexto puesto del escalafón mundial. Su regreso a la competición oficial tiene fecha: el Open 500 de Dubái a finales de febrero. Mientras tanto seguirá deshojando la margarita sobre su regreso o no a la gira europeo de tierra batida.
Tsitsipas será el martes el rival de Roberto Bautista por un puesto en las semifinales del Abierto.
Joan Solsona | MARCA