El expresidente de Bolivia Evo Morales volvió este lunes a su país, a casi un año de su abrupta salida, en donde fue obligado a renunciar.
Luego del golpe de estado Morales cruzó desde Argentina la frontera en la localidad boliviana de Villazón, donde le esperaba un multitudinario recibimiento.
El expresidente boliviano fue despedido con un acto masivo en La Quiaca, en el lado de Argentina, país en el que estuvo desde el pasado 12 de diciembre.
Vuelve un día después de que haya retomado el poder su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS). Al acto ha asistido el presidente de Argentina, Alberto Fernández, quien lo despidió antes de cruzar a Bolivia, donde iniciará una caravana hasta Chimoré.
Morales regresó acompañado de quien fue su vicepresidente durante sus casi 14 años en el poder, Álvaro García Linera, y varios exministros.
El exmandatario vuelve a su país después de que el MAS haya recuperado el poder con Luis Arce como nuevo presidente de Bolivia. Su partido ganó las elecciones generales del mes pasado con una amplia mayoría del 55,1 por ciento de los votos.
La Justicia boliviana retiró días atrás una orden de aprehensión en su contra, en uno de los procesos judiciales iniciados con el Gobierno de facto.
