La referida marca fue establecida en Japón, gracias al trabajo de un grupo de especialistas.
Esta nueva velocidad es aproximadamente el doble que la marca anterior de 178 TB por segundo, establecida en 2020. Para ponerlo en perspectiva, en la mayoría de hogares la conexión va desde los 10 Mbps hasta 1 Gbps.
El experimento se logró en una línea de fibra óptica de más de 3.000 kilómetros de largo y usando infraestructura de cable existente. Eso sí, con algunos complementos.
El envío de datos a tal velocidad fue posible gracias a un proceso de transmisión con láser y amplificadores. Estos últimos compuestos de tierras raras como el tulio y el erbio.
Además, los investigadores usaron una línea de fibra óptica de cuatro núcleos, en lugar de un núcleo convencional, lo que permite reducir la distorsión de la señal en transferencias de largas distancias. Luego, las señales se dividen en varias longitudes de onda enviadas al mismo tiempo, empleando una técnica conocida como multiplexación por división de longitud de onda (WDM, por sus siglas en inglés), reseñó el portal Interesting Engineering.
Una de las ventajas de esta tecnología es que es compatible con la infraestructura existente. Debido a que posee el mismo diámetro que la fibra de un solo núcleo que se usa en la mayoría de conexiones en la actualidad.
Con información de Actualidad RT