Odette, nombre local del tifón que tocó tierra en la isla de Siargao, es el más fuerte que azotó este año el país asiático.
La tormenta cortó las comunicaciones y la electricidad en distintas zonas, arrancando tejados y derribando postes eléctricos de hormigón.
Más de 300.000 personas huyeron de sus hogares y de complejos turísticos cuando el Rai asoló las regiones del sur y el centro del archipiélago.
Con información de Actualidad RT