Después de vencer a Suecia con un gol agónico y tener que enfrentar en la última jornada a quién en teoría era la más “débil” del grupo F, todo parecía a pedir de boca para los teutones pero al final terminan siendo la gran decepción del Mundial y eso que queda mucho por delante.
Alemania controló el partido de principio a fin, con ese juego parsimonioso que lo caracteriza, como si el empate le sirviera para avanzar o tal vez confiado de que el gol en cualquier momento podía llegar.
Corea del Sur hizo un partido digno de felicitar, a pesar de estar eliminados jugaron como si de ese encuentro dependiera su clasificación. Un ejemplo de compromiso fueron todos los jugadores coreanos y principalmente su arquero, que sacó varios remates importantes.
El conjunto de Löw entró en el momento crítico, el partido se terminaba, y se fue arriba a buscar un tanto de cualquier manera. Los goles llegarían pero para los asiáticos que tras una carambola en el área alemana Kim Young-Gwon (90+3) anotaría el primero.
Alemania desesperado metió a todos sus jugadores en campo rival, incluido Neuer. Entonces, Corea en una contra marcaría el segundo, Son (90+6) el jugador de Tottenham anotó a puerta vacía y sentenció a los alemanes.
Suecia le pegó un susto a México
En el otro partido Suecia goleó a México 3-0 con los tantos de Augustisson (50′), Granqvist (62′) de penal y un autogol de Álvarez (74′). Con ese resultado Suecia se clasificó como primera de grupo y dejó a los mexicanos a merced de lo que sucediera entre Alemania y Corea del Sur.
Para suerte de México, Corea venció a Alemania, y terminó avanzando como segunda de grupo. Dentro de poco conocerá su rival, que será el primero del grupo E. Mientras que los suecos enfrentarán al segundo de esa misma zona.