- ¿Qué objetivos de alto valor persigue el Comando Conjunto de Operaciones Especiales?
El ELN es prioridad, aunque tiene su estructura de mando y control en Venezuela. En cuanto a los Gaos (grupos armados organizados) residuales, están “Guacho”, “Gentil Duarte”, “Cadete” y “Mordisco”. Además de los jefes de estructuras como el “Clan”, “los Pelusos” y “los Puntilleros”, que delinquen en diferentes zonas del país.
- Si los del ELN están fuera del país, ¿a quién buscan en Colombia?
No quiero dar nombres, pero son un par de jefes de los denominados frentes de guerra y, por supuesto, algunos comandantes de frente.
- ¿Las operaciones son constantes?
Tenemos lo mejor de la inteligencia, tropas dedicadas los siete días de la semana, las 24 horas. Su objetivo ubicar esos blancos, empleando la fuerza siempre con los más altos estándares en derechos humanos y Derecho Internacional Humanitario (DIH).
Tenemos un gran apoyo con la Policía Nacional y nuestra Fiscalía General, es un trabajo articulado muy importante.
- ¿Qué tan cerca ha estado la Fuerza Pública de “Guacho”?
En los últimos dos meses, en unas tres oportunidades.
- ¿Y qué pasó?
Atrapar a “Guacho” implica la aplicación de los derechos humanos y el DIH. Y si para dar de baja a “Guacho” tenemos que pasar por encima de una familia humilde o de unos indígenas o de una lancha con personas indefensas, nosotros preferimos dejar que pase el blanco y no atacarlo. ¿Por qué? Nosotros tenemos un entrenamiento que nos obliga a minimizar y limitar el daño colateral.
- ¿”Guacho” se está escudando en la población civil?
Sí, estos delincuentes abusan, poniendo a las comunidades indígenas y minorías étnicas como escudo. Preferimos insistir y persistir, como lo estamos haciendo, y estamos seguros de que nuestro profesionalismo nos va a llevar al éxito y a cumplirle al país.
- ¿Qué tanto cambió el país con unas FARC ya no como guerrilla?
Por supuesto que esto ha producido un cambio en el país, ese cambio se vive en muchas regiones positivamente. Pero otros grupos tratan de persistir en hacerle daño al pueblo colombiano, y digamos que no podemos ser triunfalistas. Hay que ver todo esto más allá del blanco y el negro, nos falta mucho todavía para poder entregarle al pueblo colombiano, como se merece, un país estabilizado y consolidado. En esa lucha seguimos de la mano de cada gobierno que elija el pueblo colombiano.
Fuente
Con información de El Tiempo
