Una red social para bailar, para divertirse, montar tus rutinas de ejercicios, o quizás tu rutina de maquillaje. Incluso para hacer una que otra bromita o mostrar tu vida.
Pero, ¿será esto “real” o solo será una apariencia? ¿Será que hay un trasfondo oscuro detrás de esta aplicación?
Marilyn Martínez una joven de 29 años de edad que residía en Perú, en el distrito San Borja, se dedicaba a hacer videos para su perfil social de Tik Tok, donde los subía bailando, haciendo ejercicios y en muchos de ellos salía con su esposo que no se veía muy feliz por lo que ella hacía
Hasta que el día 16 de enero del año en curso lo demostró, apuñalándola con un cuchillo de cocina en el abdomen mientras ella se encontraba acostada en su cuarto con su hijo de 10 años.
Una escena bastante escalofriante para un niño de esa edad, que solo pudo correr y esconderse en el baño del apartamento mientras pasaba el horrible suceso.
Que irónico que un día antes de que Marilyn perdiera su vida, había publicado un video con la canción “Flowers” de la cantante Miley Cyrus, que habla del empoderamiento femenino.
Quién diría que ese sería su último video. ¿Será que por fin había tomado la decisión de dejar a su agresor? al cual conocía desde sus 17 años y que según fuentes policiales ya había denunciado múltiples veces por maltrato.
Aunque su familia no se imaginaba la pesadilla que aquella mujer estaba viviendo y que lo peor estaba por suceder.
Un panorama terrorífico lleno de gritos y pedidas de auxilio, hizo que los vecinos prendieran sus alarmas y llamaran a la policía quienes se terminaron encontrando con esa escalofriante y desgarradora escena y por supuesto al autor de la misma, Alexander Israel Pinedo Barrón quien sin pelos en la lengua confesó con detalles aquel crimen atroz.
Fueron los celos los que provocaron que Pinedo Barrón tomara aquel cuchillo y acabara sin piedad alguna con la mujer que una vez juró respetar y cuidar.
Con frialdad, frente a las cámaras del medio dijo; “Normal, grábame, con todo, todo ha sido puñal. Yo cuando la maté vi el hueso de ella, vi toda la sangre que salía (…). Entonces yo dije: ‘acá, me toca a mí’, pero como soy un cobarde, no me pude suicidar, ya se lo que me espera”.
¿Cobarde? “Él sabía lo que estaba haciendo y delante de su hijo menor, quitándole la vida a su propia esposa (…) sin ningún motivo. Yo quisiera saber si hubo algún motivo para cometer eso, ese crimen tan horrible, tan sanguinario a una dama” exclamó con gran dolor el tío de la víctima.
El asesino está bajo la disposición de las autoridades mientras se define su situación judicial. Se desconoce en manos de quién quedará el cuidado del menor.
Y es así como se le desgracia la vida a un niño tan pequeño e inocente, que un día pasa de ver a su mamá bailando y riendo en Tik Tok y al otro ver cómo le arrebatan la vida frente a sus ojos, y quizás se pregunte más adelante el ¿por qué?, ¿por celos?, ¿por mujer?, ¿por una aplicación?, ¿por cobarde?, pero quizás nunca encuentre una respuesta definitiva ante aquel monstruo que se hizo llamar su “padre”.
Autora / María Fernanda Orellana García
* Crónica escogida como una de las mejores, realizada por estudiantes de Comunicación Social, de la Universidad Rómulo Gallegos, en San Juan de los Morros, estado Guárico.
Cátedra: Periodismo Interpretativo, 5° semestre / Docente asesor: Ramón Figuera.