El prófugo Julio Borges declaró a temprana hora del día de ayer que decidió entregarse a la justicia venezolana para enfrentar la acusación en su contra por magnicidio en contra del presidente Nicolás Maduro el pasado 4 de agosto.
Borges fue interrogado el día de ayer por un juez de instrucción durante unas quince horas, quien le negó dejarlo en libertad con medidas cautelares solicitada por la defensa del acusado, información confirmada anoche por la Fiscalía de Venezuela.
Deseoso de demostrar su anunciada disposición a “colaborar plenamente con la justicia venezolana”, Borges se presentó ayer a las 9.17 horas de la mañana en el Juzgado de Instrucción. Podía haber esperado a que le detuvieran y lo esposaran, pero evitó ser fotografiado en esa situación, personándose voluntariamente en el lugar. Así lo habían pactado la víspera a través de sus abogados, explicó el portavoz de la Fiscalía de Venezuela.
Vale recordar que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) acordó la detención del diputado Julio Borges a través de una nota de prensa publicada en la web del máximo tribunal que expresaba que existen elementos “que comprometen su responsabilidad” en la comisión “flagrante” de los delitos de “instigación pública continuada; traición a la patria; homicidio intencional calificado en grado de frustración” contra el presidente Nicolás Maduro.
En una nota de prensa, el TSJ indicó que todos los delitos están previstos y sancionados en los artículos 285, 128, 405 y 406 del Código Penal.
Entrega pactada con la Fiscalía
Borges fue trasladado poco antes de las dos de la tarde a la sede de la Fiscalía en coches policiales camuflados (no iba esposado, explicaron fuentes judiciales). Testificó hasta alrededor de las nueve de la noche, ante un juez de instrucción que tenía 24 horas de plazo para fallar no sobre el fondo del asunto sino sobre si era necesario o no mantenerlos en prisión preventiva.
Su conclusión fue que el riesgo contra su integridad física era significativo y que no puede otorgarle libertad con condiciones.
María Corina Machado se fugó y pide asilo a EE.UU.
En horas de la madrugada se pudo conocer que la dirigente política de Vente Venezuela, María Corina Machado, decidió abandonar Venezuela a pesar de la prohibición que tenía en tal sentido.
Debemos recordar que un tribunal capitalino prohibió la salida del país de la exdiputada opositora María Corina Machado, investigada por los violentos incidentes en febrero en Caracas y por un supuesto complot.
La decisión del tribunal forma parte de las investigaciones de los sucesos ocurridos el 12 de febrero de 2014, así lo indicó en su oportunidad el diputado Diosdado Cabello, quien para entonces fungía como presidente de la Asamblea Nacional, durante su programa Con el mazo dando que transmite la televisora estatal (VTV).
“Ahí viene la justicia, tenga el apellido que tenga, se llame como se llame, si ha conspirado contra este país (…) si ha llamado a la desestabilización, al asesinato del presidente Nicolás Maduro”, dijo Cabello luego de leer el texto de la orden que dictó la jueza Adriana López.
Para entonces, uno de los abogados de la exdiputada, Jesús Loreto, consideró irregular que el presidente de la Asamblea Nacional tuviese acceso al expediente y a la medida antes que los implicados.
“El presidente de la Asamblea Nacional no tiene facultades para leer las medidas”, acotó en su momento.
Machado afirmó inmediatamente al conocer la noticia que todas estas acciones en su contra dejan en evidencia la intención del régimen venezolano de aplacar y callar todas las voces de protesta.
A pesar de haber dicho “Si algo he demostrado, es que no hay riesgo ni deseo de irme de mi país”.
No obstante, cambió de opinión y se fugó clandestinamente de Venezuela en el día de ayer y aterrizó en EE.UU.
Desde allí declaró que “continuará su lucha contra la brutal dictadura de Maduro, ahora de la mano con Donald Trump”.
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San Juan de los Morros, 28 de diciembre de 2018, día de los Santos Inocentes.
Alex Vásquez Portilla
