EN COLOMBIA / Evalúan uso de tarjeta profesional para médicos venezolanos

Caracas.- Humberto Calderón Berti, embajador de Venezuela ante Colombia, designado por la Asamblea Nacional, promovió la entrega de una tarjeta profesional a los médicos venezolanos que quieran ejercer en Colombia, lo cual fue tratado este sábado con la directiva del Colegio Médico Colombiano.

“El embajador Humberto Calderón Berti tuvo una reunión de acercamiento con el Colegio Médico Colombiano para tratar sobre la obtención de una tarjeta profesional para médicos venezolanos”, escribió la embajada.

Aunque no es el destino principal de los médicos que se han ido – como sí lo son Chile (23%), España (20%) y Estados Unidos (15%) – se debe tomar en cuenta que los médicos venezolanos radicados en Colombia serían de gran ayuda para atender la salud primaria de los venezolanos con estatus migratorio irregular y evitaría que congestionen las salas de urgencias de centros privados y públicos.

Igualmente representaría una reducción de los costos de estos servicios, especialmente para las zonas principales receptoras de personas que migran, las fronterizas con Venezuela, así como otras entre las que se cuentan el Atlántico, Antioquia y Bogotá.

La Federación Médica Venezolana (FMV) calcula que, desde el año 2004 hasta el 2018, alrededor de 26 mil 160 médicos dejaron el país. El presidente de la federación, Douglas León Natera, detalló que durante los últimos cuatro años, se registró un alza importante en los números de la diáspora.

El cálculo de la cifra se hace con base al número de galenos que han solicitado su carta de reciprocidad —documento necesario para el ejercicio de la medicina fuera del país y que establece las prerrogativas que tienen para poder laborar en el exterior.

El recurso humano de la salud está golpeado. La cantidad de médicos venezolanos que se fueron del país ronda el 25%, según afirma el infectólogo Julio Castro durante un foro sobre la diáspora realizado en el Hospital Universitario de Caracas (HUC), el viernes 13 de julio.

Cabe destacar que pese a las limitaciones de su propio sistema de salud, Colombia ha recibido a más de 1,4 millones de personas migrantes y ha optado por una política solidaria: garantiza la atención en urgencias médicas, partos y vacunación.

También garantiza el derecho a la salud a los hijos de venezolanos nacidos en Colombia. Los recién nacidos en Colombia, y que se encuentran en riesgo de apatridia —en Colombia la ciudadanía depende del estatus migratorio de los padres— tienen derecho a ser afiliados a una Entidad Prestadora de Salud (EPS), instancias que se encargan de registrar usuarios al sistema de salud colombiano.

Según el Ministerio de Salud de Colombia, en los últimos dos años, se había brindado atención médica a más de 270. 000 venezolanos. Sin embargo, la solidaridad por sí misma no es una política sostenible en el tiempo. Según algunos funcionarios del gobierno colombiano, las deudas de los hospitales públicos por atención a migrantes en los últimos dos años se elevan a un aproximado de 70 millones de dólares.

Otras cifras señaladas por el Banco Mundial estiman que el costo anual para acoger a los migrantes en Colombia (excluyendo la infraestructura y las instalaciones) está cerca del 0,4 por ciento del producto interno bruto nacional. De ahí que no solo se necesitará de más apoyo financiero de la comunidad internacional, sino de otras vías para lograr la atención social y económica a los venezolanos migrantes.

Una de las alternativas apunta a la mano calificada de médicos venezolanos que han migrado a Colombia. La Fundación Manitas Amarillas, que nació como una iniciativa entre médicos de ambos países para atender a las personas que migraban de manera irregular, es un ejemplo de que esto podría funcionar.

Migración Colombia informó el pasado jueves que al menos 1,4 millones de venezolanos se han radicado en la nación colombiana para huir de la crisis que hay en Venezuela.

Yazmín Antía | El Universal