La pareja se llevó a sus dos hijas menores y se instalaron, junto a otros venezolanos, en el cuarto piso de una casa ubicada en la calle Francisco Bolognesi N° 179, a media cuadra de la comisaría de Playa Rímac.
Todo iba bien hasta que, en el Día de la Mujer, Rojas, movido por los celos, esperó que su pareja regresara de una fiesta y la atacó con un arma blanca hasta dejarla sin vida.
Ambos tenían trabajo y se les veía en las calles de El Callao: él vendía hamburguesas; ella repartía volantes. Los conocidos dijeron que peleaban con frecuencia. Ahora sus hijas están a la espera de lo que decida un fiscal.
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Con información de Versión Final