Sin embargo, cuando dormimos, el cerebro se relaja y libera menos de esta sustancia, dando como resultado una mayor cantidad de erecciones nocturnas y, por lo tanto, que amanezcamos firmes como piedras.
Aunque las erecciones matutinas no tienen mucho que ver con la excitación, son un excelente pretexto para que lo primero que hagamos en el día sea tener sexo con nuestras parejas, ya que está comprobado que esta actividad tiene grandes beneficios para la salud.
Exploremos algunas de las más importantes:
- Mejora el estado del ánimo
¿Has notado que después de comer o tener sexo rara vez nos sentimos ansiosos? En un estudio realizado por la revista científica PNAS (Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America) se encontró que ambas actividades reducen considerablemente el estrés, ya que inhiben las respuestas de ansiedad que recibe el cerebro.
Además, durante una relación sexual se producen mayores niveles de oxitocina, una sustancia que genera una sensación de bienestar en el cuerpo.
- Rejuvenece (O, al menos, nos hace sentir más jóvenes)
Como explica Medical Daily, el sexo mañanero también genera una gran producción de endorfina, otro químico que genera una sensación de bienestar. No obstante, la sustancia también tiene un “efecto rejuvenecedor”.
En una investigación realizada por el Hospital Real de Edimburgo, el médico David Weeks encontró que los pacientes entre cuarenta y cincuenta años de edad que dijeron haber tenido sexo tres veces por semana por las mañanas se veían de cinco a siete años más jóvenes que los que no.
- Quema calorías
Todos sabemos que el ejercicio es la mejor forma de ponernos en forma y quemar el exceso de carbohidratos que consumimos durante el día. Sin embargo, en una investigación publicada en PLOS ONE se encontró que en parejas jóvenes, los hombres queman 4.2 calorías por minuto, mientras que las mujeres 3.1. Si comparamos esto con una rutina de ejercicio, equivale a una quema calórica mayor que caminar, aunque menos que correr.
Un gran sustituto para quienes mueren de flojera de ejercitarse en la mañana y, lo mejor, sin salir de su cama.
Fuente
Con información de GQ