Miranda.- Resentida con su madre, una joven de 22 años de edad cometió un matricidio y fingió una muerte accidental.
El cuerpo de la víctima lo hallaron calcinado, pese a que su hija alegó que fue un accidente, descubrieron que se trató de un asesinato, donde la autora material resultó ser la propia hija de la occisa.
Las pesquisas del Cicpc llevaron a determinar la culpabilidad de la matricida en el aberrante crimen, ya que, esta manifestó incongruencias durante su testimonio.
Por su parte, el padre de la agresora informó que días previos, este le dio un envase con combustible, dicho envase fue hallado en la escena del crimen.
Matricidio
La víctima fue rociada con gasolina y prendida en fuego, para disipar las llamas, esta se lanzó al suelo, pero cuando lo logró perdió el conocimiento. Su hija, optó por subirla a la cama y cambiarle la ropa, en el proceso, cortó parte de la piel quemada con tijeras.
Acto seguido, la agresora abandonó la vivienda. El día siguiente regresó y encontró a su madre sin vida, por lo que planeó simular un accidente.
Sin embargo, los peritos notaron que la escena donde perdió la vida Belki Yajaira Méndez García (58), había sido modificada.
Hija resentida
Faibelth Susej Mauco Méndez (22), es el nombre de la matricida, quien al ser encarada expresó que su madre “la maltrataba constantemente”, acción por la cual, actualmente, ella aprovechaba que esta tenía impedimentos físicos para maltratarla.
El día del hecho la situación pasó a mayores, puesto que, la víctima no controló sus esfínteres y su hija, sostuvo una discusión con ella.
Resentida y molesta, la matricida bañó a su madre con gasolina y le arrojó un yesquero, acabando con su vida.
Como evidencia, fue recolectada la vestimenta de la fémina antes y después de su muerte.
El caso de matricidio ocurrió en la carretera principal San José de los Altos, sector La Osi, municipio Guaicaipuro del estado Miranda.
