Caracas.- El Atlético trata este verano de compaginar una fuerte inversión en infraestructuras como la que se ha hecho para el nuevo estadio con un equipo cada vez más competitivo tanto por los refuerzos como por la continuidad de sus jugadores más importantes. La deuda ha crecido de forma considerable, al menos hasta que se vendan los terrenos del Vicente Calderón, y eso hace que los controles económicos establecidos por la La Liga resulten más férreos si cabe.
En ésas andan los responsables rojiblancos, conscientes de que muchas entidades, varias de ellas españolas, renunciaron precisamente a la construcción de su nueva ‘casa’ por no verse capaces de atender a los dos frentes.
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