La estrella de cine, Jane Fonda, lo afirma a sus 80 años durante una entrevista en un reconocido programa televisivo.
Por su parte, la princesa Isabel Carlota de Francia, a quien le preguntaron en el siglo XVIII (19) a qué edad desaparecía el deseo sexual y respondió: “¿cómo voy a saberlo? ¡Solo tengo 80 años!”.
Anna Freixas, doctora psicóloga, escritora y profesora universitaria, desmiente una serie de mitos y tabúes en su libro “Sin reglas” en donde explica diversos temas relacionados a la sexualidad de las mujeres mayores, y esto lo hace basándose en estudios científicos y testimonios de 729 mujeres a las que ha entrevistado.
Las mujeres entrevistadas tienen edades que varían de 50 a 83 años de edad, y entre ellas hay orientaciones sexuales de todo tipo, es decir, heterosexuales, bisexuales y lesbianas, quienes hablan de sus deseos y evalúan sus propias experiencias.
“La sexualidad en la madurez es una experiencia múltiple y diversa, en la que no hay reglas”, afirma Freixas.
Con respeto a las principales creencias infundadas sobre la sexualidad femenina tras la menopausia, Freixas comenta que “la más importante es que esta etapa de la vida supone el fin del deseo. También la idea de que la sexualidad deja de interesar a las mujeres a medida que se hacen mayores”.
Ante esto, ella aclara: “El deseo es el deseo, antes y después del cese de la menstruación, así que no hay un deseo ‘x’ antes de la menopausia y un deseo ‘y’ después de la menopausia”.
Y explica que las características del deseo sexual de cada mujer tras la menopausia “dependerá de las circunstancias de vida de cada persona; tener o no tener pareja y la calidad de la relación con esta. La salud y la satisfacción vital son elementos que determinarán qué tipo de sexualidad se vive en cada momento”.
Fuente
Con información de la EFE
