Monagas.- Un infante de tan solo siete meses de edad murió ahogado en lo que parece un descuido por parte de los adultos a cargo de él.
Este suceso tuvo lugar en Maturín, estado Monagas específicamente en la parroquia Las Cocuizas, donde el pequeño vivía con su familia.
De acuerdo al parte policial, el niño estaba en la sala, cuando de pronto en un descuido de tan solo minutos su madre notó su ausencia.
La infortunada madre dijo haberlo buscado en cada rincón de la vivienda hasta que lo encontró flotando en la piscina ubicada en el patio de la casa.
Aunque el pequeño fue trasladado a un centro asistencial de la localidad, éste llegó a la emergencia sin signos vitales.