Sin duda este Mundial ha sido de los entrenadores y de las selecciones que aplican un buen orden en defensa combinado con un contragolpe efectivo. Croacia, Rusia, Inglaterra, Suecia, Francia y ahora Bélgica, equipos que todavía sobreviven, lo han demostrado así.
Brasil se apoderó de la pelota apenas sonó el pitazo de arranque, tuvo las primeras dos ocasiones y falló. Ya lo saben, en el fútbol “quien perdona, muere”. Los diablos rojos se fueron arriba en el marcador tras el cobro de su primer córner del partido, lo hizo Fernandinho (13′) en propia puerta.
A partir de allí, los belgas se apegaron a la “ley del torneo”, ordenaditos atrás y salir a la contra. Cada balón perdido por los brasileños en campo rival se convertía en una ocasión de peligro en su contra y en una de esas Kevin De Bruyne (41′) marcó el segundo.
En la segunda mitad, Tite hizo los cambios para intentar revertir la situación, entró Firmino (46′), Douglas Costa (58′) y Renato Augusto (73′), este último logró anotar el descuento 3 minutos después de ingresar, sin embargo, a Brasil no le alcanzó.
Bélgica avanza a Semifinales y enfrentará a Francia, en un partido donde se juega un boleto a la final de la Copa del Mundo acompañado de un 70% de probabilidades de ser campeón, tomando en cuenta los rivales que podrían llegar a esa máxima cita.
Un parrafo aparte para Eden Hazard que hizo un partidazo ante la canarinha y ha jugado un excelente mundial. En el próximo partido la máxima estrella del conjunto belga se jugará el Balón de Oro del torneo en contra de Mbappé.