“Muchos de ellos llegan en condiciones desesperadas, a comunidades de acogida muy golpeadas por la pandemia”, señaló el portavoz de ACNUR Babar Baloch.
En ese sentido, Baloch explicó en su rueda de prensa de este viernes que “es urgente protegerles y asistirles”.
El portavoz recordó que más de 5.4 millones de venezolanos han dejado su país en los últimos años debido a la crisis política y económica. Y, 4.6 millones de ellos están en países de Latinoamérica y el Caribe.
Baloch señaló que las rutas por los que los venezolanos siguen abandonando el país son zonas de operación de redes de tráfico ilegal. Así como por regiones controladas por grupos armados. En consecuencia, muchos de estos migrantes y refugiados sufren violencia y explotación.
ACNUR calculó que un 70 por ciento de los venezolanos que llegan a Colombia lo hacen a pie, “algunos sólo con ropa en su mochila”. Y, además, lo hacen “en condición muy débil, a veces mostrando síntomas de malnutrición, debido a que la situación en Venezuela sigue deteriorándose”.
La agencia de Naciones Unidas también notó un reciente aumento del número de personas, incluyendo mujeres y niños, que hacen esta ruta en solitario. Obviamente, teniendo que separarse de sus familias.
“Muchos sufren trauma y estrés y requieren asistencia humanitaria y protección inmediatas”, insistió Baloch.
Acciones de ayuda conjunta
El jueves, 10 de diciembre, 159 organizaciones humanitarias lanzaron una petición de ayuda internacional por valor de 1.440 millones de dólares. Estiman que con esa cantidad se puede ayudar a los 4,6 millones de venezolanos refugiados en países de la región.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) estima que un 30 por ciento de los refugiados y migrantes en Latinoamérica se encuentran en situación irregular. De hecho, ese porcentaje puede aumentar al 50 por ciento en algunos países de la zona.
Con información de la EFE