Comentaron que desde la Ciudad Jardín se desplazaba una camioneta Súper Duty, de color azul, matrícula A69AH40, conducida por el señor Joaquín Álvarez, quien reside en La Victoria del municipio Ribas.
Faltando poco para llegar al peaje, uno de los neumáticos delantero estalló y la unidad saltó la isla divisoria de la ARC, atravesando el canal hacia Valencia y posteriormente cayó a un abismo en la zona de seguridad. Producto del impacto el otro caucho se averió y a Dios gracias el conductor resultó, solamente, con aporreos generalizados a nivel del estómago y su rostro sumamente pálido.
Al salir del abismo, el ciudadano narró ante los periodistas las peripecias que vivió en ese momento del accidente: “Cuando sentí que estalló el caucho delantero, me encomendé a mi Dios”.
“Ya estoy muerto, solo usted mi Dios me salvará, y en tus manos me encomiendo. Seguidamente “cerré mis ojos y cuando los abrí, ya estaba en el abismo”.
“Me vi como si ya estuviera muerto y al darme golpes, di las gracias a Dios. Fue algo espantoso”, expresó. Adicionando lo siguiente: “Yo vengo de Maracay, donde estaba comprando pescado, ya que en La Victoria no se consigue nada de alimentos del mar”.
Al lugar se presentaron funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, fiscales de Tránsito Terrestre y la Brigada Vial de la Policía de Aragua, quienes coordinaron el dispositivo para extraer la camioneta del abismo.