Extraña que no hayan firmado su lamentable comunicado, en contra de nuestros candidatos a la Asamblea Nacional.
De entrada, les decimos que, ellos y quienes vamos a votar, hemos tomado la ruta que, según todos los sondeos de opinión, anhela la inmensa mayoría de los venezolanos, como salida a la crisis: el camino de la paz.
Si, sin vacilaciones, desechamos las invasiones de los marines y los golpes de estados que ustedes promueven, y que nadie entiende por qué no se atreven a decirlo públicamente.
Nosotros estamos participando en un proceso apegado a la letra constitucional: la elección de la próxima Asamblea Nacional (AN).
Pero, la verdad verdadera, es que el evento nulo, y no vinculante, lo constituye la consulta que ustedes van a realizar, y que el régimen la promueve, porque el madurismo busca restar votos al campo opositor, que dignamente nosotros representamos en el Guárico.
Después del 7 de diciembre, cuando estemos preparándonos para participar en las próximas elecciones regionales de 2021, porque somos demócratas, y admitimos la diversidad , con toda seguridad, que celebraremos el reencuentro con muchos de ustedes, quienes en privado nos han manifestado la voluntad de participar en esos venideros comicios.
Si, así será, porque a pesar de que algunos de ustedes se van a abstener, prefiriendo entregar la AN al régimen, sin plantear batalla, para nosotros ustedes no son traidores, simplemente, están equivocados, son de la oposición y continuaremos, con diferencias, luchando por derrotar a este régimen a través del sendero democrático.
Después del fracaso del carmonazo y del paro petrolero.
Luego de la abstención de 2005, con la que le entregaron todos los poderes públicos a Chávez.
De la frustración de “la salida” con su lamentable saldo de 43 jóvenes asesinados.
Después del intento de golpe de estado del 30-4-19 en la Carlota. Y de las mentiras de Trump, de que todas las opciones estaban sobre la mesa.
Nosotros también pudiéramos concluir que la violencia está agotada, y no es aceptada por el pueblo de Venezuela.
Es más, por la vía democrática le ganamos a Chávez el Referendo Constitucional el 2007, y con el voto le arrebatamos la AN el 2015 a Maduro.
Por lo que estamos convencidos que será, a través de la ruta democrática como derrotaremos al peor gobierno que ha tenido nuestra patria.
La retahíla de problemas del país que los amigos invisibles detallan, en su comunicado, los conocemos, y estamos debatiéndolos en esta campaña cara a cara con el pueblo, para que eleve su conciencia acerca de la responsabilidad del régimen en la generación de los mismos.
Pero esa no es la discrepancia entre ustedes y nosotros. El debate está planteado, sobre todo, en cómo es que ustedes van a sacar a Maduro para realizar las deseadas elecciones libres.
Eso es lo que nos separa por ahora, por qué si no es a través del voto, será con violencia y sangre, y repetimos una vez más, que esa ruta no la queremos para nuestro pueblo.
Lo que está en discusión es la estrategia política. No participar en este proceso electoral es hacer lo que Maduro quiere que hagamos, que le entreguemos toda la AN, para avanzar en su proceso totalitario.
No votar porque no están presente todas las condiciones electorales, que exhiben los gobiernos civilizados, es pedirle a Maduro que se transforme en un demócrata. Las condiciones se alcanzan en las luchas de todos los días; hay que pelearlas participando, porque si no votamos nos transformaremos en colaboracionista del régimen.
Lo que lamentamos es que ustedes, que nunca escriben una cuartilla para denunciar las equivocaciones y los atropellos del régimen, hayan puesto empeño para agredir a un grupo de amigos de distintas tendencias políticas, que están realizando un esfuerzo destinado a organizar en el país, las fuerzas necesarias para el cambio.
Sobre todo, cuando sabemos que la solución de la crisis venezolana no depende exclusivamente de la ayuda de la comunidad internacional; pues sin fuerzas internas, Simón García dixit, vinculadas a estrategias democráticas, que representen a la población y estén engarzadas a los problemas humanitarios, que afectan a la mayoría de los ciudadanos, el campo internacional estaría debilitado para acometer la solución de la crisis política, que siempre se dará a través de diálogos, acuerdos y votos.
Hasta luego, creo que tenemos que aprender a convivir con nuestras diferencias.