Con el mayor respeto que usted se merece y que lo reconocemos como el Presidente de todos los venezolanos, chavistas y opositores aunque no lo quieran reconocer así, así es; comandante en jefe de la Fuerza Armada Bolivariana, y electo por voluntad popular, pero no se nos puede quitar el derecho de disentir, opinar, diferir, criticar, y aquí estoy, aguantando la pela más que muchos porque estoy identificado como un chavista de esos que no aguanta dos pedías para decir las cosas clariiiiito y raspao.
Para nadie es un secreto que se está pasando por la peor crisis de los últimos 50 años inoculada o no, pero que el 90% cree que la culpa es del gobierno, de lo que no estoy de acuerdo, pero de lo que sí lo estoy es, que en los últimos tiempos ha habido una forma grosera de engañar al pueblo, y usted, señor Presidente, tiene que cerrar el pico porque usted sabe que el comandante Chávez enseñó a este pueblo a pensar, a analizar y a no dejar que lo tomen bolsa.
Con todo el respeto le digo que lo que está pasando no es grave sino gravísimo. Los paños calientes no curan las heridas en el estómago. Los aumentos de salario mínimo no han sido solución para nada. Ha prevalecido el abuso de parte y parte. Las alternativas han sido una burla más y lo de los últimos meses poco a poco ha ido rebozando el vaso hasta llegar a salir a la calle a reclamar con justísima razón.
Nadie, señor Presidente, puede vivir con un kilo de carne mensual, hoy amaneció a 200 mil y el cochino a 350 mil, que es menos del sueldo de la mayor parte de los venezolanos. Tampoco con un cartón de huevo que está en los 200 mil bolívares y medio kilo de mortadela que está por los 150 mil, que es la cesta ticket, ¿y lo demás?, serian 25 días más o menos sin echarle nada al buche.
Es hambre lo que se está pasando con los altísimos precios de la comida, señor Presidente, hasta con el pescado que nadie gasta un centavo en comida. Pero la verdad es que a veces pareciera que se burlaran del dolor ajeno con ridículas soluciones o engaños tras engaños.
Cuando Freddy Vernal, señor Presidente, salió con la ridícula idea de la cría de conejos para amortiguar el hambre, cierto que pareció una ridiculez. Ya por ahí se notaba que las cosas no iban bien, cualquiera otra idea era mejor que esa. Criar palomas hasta sería mejor.
Señor Presidente, cerrar el pico sería mucho mejor que decir cualquier incoherencia o alguna oferta para engañar. Mientras se acercaban las navidades día a día aumentaba todo. Hace apenas mes y medio la carne estaba a 40 mil el kilo, el cochino a 30 mil, y los ingredientes para las hallacas baraticos, pero entró diciembre y comenzó el desastre en los precios a lo macho.
Usted, señor Presidente, creyendo que iba a hacer una gracia le salió un morisqueta peligrosísima ofreciendo un pernil y los ingredientes para las hallacas en el programa alimentario del CLAP, la gente medio lo creyó porque Freddy Vernal, también encendió la mecha: el pernil, el pernil, para cada familia y ahí están los resultados.
A la larga, señor Presidente, todo se vino abajo y ni Cilia se lo creyó, tampoco Freddy ni nadie con sano juicio. Ya con el mundo encima no quedó más remedio que buscar culpables y también se pelaron. Que Portugal saboteó el pernilazo. Salió el canciller diciendo que su gobierno no estaba en condiciones de sabotear a nadie y con pernil menos.
Mientras el pueblo protestaba airadamente y con sobrada razón por el vulgar engaño, se siguió echando la culpa a Portugal y sale el gobierno diciendo que los perniles no se enviaron porque no los pagaron. Y ahora, culpan al gobierno de Colombia. ¿Y entonces?.
Con el mayor respeto, señor Presidente, le digo que, si el domingo se hacen unas elecciones presidenciales seríamos barridos con el voto castigo del pueblo burlado y engañado. No tanto con el voto opositor sino los chavistas que están tan molestos como los opositores y también castigarían. Disculpe, señor Presidente, no engañe más al pueblo. Sería muchísimo mejor que cierre el pico.